Nefastas cuestiones acerca de una pretendida revisión cinematográfica de un clásico del cine.
1.- El guión hace aguas por todos sitios, además de ser auténticamente absurdo.
2.- Tener a Lee Marvin en el plantel actoral no salva el descalabro absoluto de la película.
3.- Tratar de hacer cine negro filmado en colores brillantes resulta lamentable.
4.- Angie Dickinson no solo es la peor actriz de la historia del Cine, sino que aquí su actuación es peor que mala.
5.- La actuación de Ronald Reagan representa más una broma de mal gusto que una interpretación mínimamente digna.
6.- Encajar la historieta de las carreras de coches, de no se sabe qué categoría, con cromas lamentables, es auténticamente bochornoso.
Recomiendo ver The Killers (Robert Siodmak, 1946), antes o después de ver este engendro, para que se den ustedes cuenta de lo que significa tener buena mano para hacer películas.