Dar a conocer un personaje a profundidad en una película es algo difícil de lograr, por las limitaciones del tiempo de la misma, sin embargo, este filme logra conectar al espectador, con cada uno de los personajes principales, generando un vínculo y una empatía con cada protagonista, mas allá de este vínculo a lo largo de todo el largometraje vamos acompañarlos por un camino pedregoso con muchos altibajos, hasta hacer notoria una involución en cada uno de ellos.
Su instrumentalización es muy característica y le da una identidad a la película, su banda sonora en general es muy notable y va muy bien con la temática de la película, cada foley, dialogo y secuencia auditiva esta cuidadosamente pensada, y es algo que hay que resaltar, y no es lo único que cabe resaltar, su manejo de cámara, cámara a dos perspectivas y secuencias repetitivas, cuando presenciábamos una acción que se iba a volver repetitiva dentro del largometraje junto a su sonido envolvente hace sentir al espectador más familiarizado con lo que ocurre. Es un filme que busca un punto de quiebre en el espectador y lo logra, manteniendo una esperanza que se vuelve efímera con el pasar de los minutos, hasta llegar al punto de estar totalmente ausente.