No suelen gustarme este tipo de pasteles, pero si el director está acertado, los efectos especiales son tan buenos y hay una actriz tan inspirada como Whoopi que tire del carro... pues me tiene que entretener a la fuerza.

Lo bueno lo resumo en el argumento y en el papel de esa entrañable mujer negra. Los dos ganaron el Oscar, y creo que el de Whoopi era merecido, aunque algunos de ustedes puedan escandalizarse con mi opinión.
No me digan que no se ríen con esa vidente de tres al cuarto que de repente descubre que realmente puede comunicarse con los muertos. Como siempre, saltará alguno de esos estrábicos que se creen verdaderos cinéfilos que dirá que no, que lo hace fatal, que no tiene más que este registro en su repertorio; existen dos lentes correctoras para ellos: "El color púrpura" y "The Long Walk Home". Vale, casi todo el resto de su filmografía es malillo, pero ahora estoy hablando de "Ghost", intentando ser lo más objetivo posible con respecto a esta señora. Para ponerla a parir ya incluiré una crítica en "Dino Rex".

Patrick Swayze y Tony Goldwyn cumplen.

Demi Moore sale muy guapa, quizás la vez que más, pero como actriz tampoco es la leche.

Una de cal y una de arena: casi llegan a aburrirme lo del torno, el beso final y demás escenas acompañadas por la canción "Unchained Melody" (inolvidable tema, por otra parte). No me hacen llorar, ni me ponen un nudo en la garganta, ni nada por el estilo.