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Yo mismo (o no) rating:
3
5.1
8,518
Thriller. Mystery
Moments before his comeback performance, a concert pianist who suffers from stage fright discovers a note written on his music sheet. Tom Selznick (Elijah Wood) is the most talented pianist of his generation, but has stopped performing in public because of his stage fright. Years after a catastrophic performance, he reappears in public for a long awaited concert in Chicago. In a packed theater, in front of an expectant audience, Tom ... [+]
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- es
March 1, 2014
52 of 62 users found this review helpful
Pequeña película de fondos (monetarios) españoles y actores no tanto, con un guion poco original pues ya ha sido visto, sin ir más lejos, en "Última llamada", de Joel Schumacher en 2002 y con una puesta en escena como mucho correcta. Elijah Wood interpreta a un pianista que vuelve a los escenarios tras una pausa de cinco años, angustiado y temeroso en todo momento, y se encuentra con una obra que siempre le había costado interpretar y que esta vez será el precio de su vida.
La introducción nos lleva al equívoco ya que es bastante completa y la presentación de los personajes es concisa y no deja lugar a dudas. Pero en cuanto se sienta al piano comienzan los auténticos fallos, aquellos por los que parte del público aplaude tomándolos por aciertos. Como la vida misma.
Comparar esta película con alguna dirigida por Brian de Palma o por Alfred Hitchcock me parece un insulto y un ejercicio de presunción. Nada más lejos de la realidad. Lo más relampagueante: la actuación de John Cusack. Y ese final... Pffff.
La introducción nos lleva al equívoco ya que es bastante completa y la presentación de los personajes es concisa y no deja lugar a dudas. Pero en cuanto se sienta al piano comienzan los auténticos fallos, aquellos por los que parte del público aplaude tomándolos por aciertos. Como la vida misma.
Comparar esta película con alguna dirigida por Brian de Palma o por Alfred Hitchcock me parece un insulto y un ejercicio de presunción. Nada más lejos de la realidad. Lo más relampagueante: la actuación de John Cusack. Y ese final... Pffff.
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details.
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Spoiler:
La angustia que tiene el pianista al principio es confusa: no quiere por nada del mundo dar ese concierto. Tío, pues cancélalo. Ya ves tú qué problema.
Un láser (de la mira del rifle) se pasea durante medio concierto ante los espectadores y ninguno de ellos es capaz de verlo.
El personaje de Cusack (ese que no sale en la película) tiene también delito: si lo que quieres es la llave, ¿no sería más fácil destrozar el piano y sacarla? Es más, si ayudaste a construir ese sistema, ¿no podrías profanarlo fácilmente? ¿Es mejor montar todo ese tinglado durante tres años? Ah, ¿y sabía que ese concierto se iba a producir?
El tipo toca el piano mientras se saca el móvil del bolsillo, hace llamadas, lo recoge del suelo, lo coloca tras las partituras y hasta manda mensajes, sin contar sus salidas y entradas del escenario. Y de nuevo, nadie se da cuenta.
Caer desde esa altura de espaldas y romperse solo una pierna hace del pianista un auténtico tipo duro, teniendo en cuenta que el otro se mató en la misma caída.
Lo más curioso: cinco años alejado de los escenarios por el miedo y pánico que tenía a interpretar esa obra, la misma obra imposible en la que siempre había tenido errores, y en la misma noche es capaz de tocarla sin fallos dos veces. Alucinante.
Un láser (de la mira del rifle) se pasea durante medio concierto ante los espectadores y ninguno de ellos es capaz de verlo.
El personaje de Cusack (ese que no sale en la película) tiene también delito: si lo que quieres es la llave, ¿no sería más fácil destrozar el piano y sacarla? Es más, si ayudaste a construir ese sistema, ¿no podrías profanarlo fácilmente? ¿Es mejor montar todo ese tinglado durante tres años? Ah, ¿y sabía que ese concierto se iba a producir?
El tipo toca el piano mientras se saca el móvil del bolsillo, hace llamadas, lo recoge del suelo, lo coloca tras las partituras y hasta manda mensajes, sin contar sus salidas y entradas del escenario. Y de nuevo, nadie se da cuenta.
Caer desde esa altura de espaldas y romperse solo una pierna hace del pianista un auténtico tipo duro, teniendo en cuenta que el otro se mató en la misma caída.
Lo más curioso: cinco años alejado de los escenarios por el miedo y pánico que tenía a interpretar esa obra, la misma obra imposible en la que siempre había tenido errores, y en la misma noche es capaz de tocarla sin fallos dos veces. Alucinante.