La butaca es suave y su morfología acoge la esperanza de una buena velada, también alimentada por el estupendo trailer que algún maestro de marketing ha representado en todas las cadenas.Tú veías esos desamparados colonos intentando resistir todas las embestidas desconocidas de ese "Nuevo Mundo", muriéndose de hambre, aterrado de frío e incertidumbre, luchando contra esos indios si se tercia, historias simple y reales, de las que luego reencarnas soñando...

Y una mierda, jámas nadie me había tomado el pelo de semejante manera, y eso que he votado. Lo peor era el imbécil lobotomizado de turno que mariposeaba contando la belleza de las escenas y el mágico control de (Dios ¿ por qué no lo hiciste manco?) Terrence Malick en la fotografía. Tantos tontos y qué pocas balas...

Mi consejo es que veas la versión de Disney de Pocahontas, que es lo mismo solo que ahí los árboles parlantes y el mapache rabioso de turno te entretienen. No en este film, que el aburrimiento se deprime y el suicidio se vuelve esperanzador. Si crees que estoy exagerando, te reto, te reto dos veces insensato, alquílala y veela de un tirón. El que avisa no es traidor.