Click here to copy URL
Spain Spain · Pasajero 58
floïd blue rating:
6
Mystery. Drama. Thriller. Adventure In the early years of the 20th Century, two British yachtsmen (Michael York and Simon MacCorkindale) stumble upon a German plot to invade the east coast of England in a flotilla of specially designed barges. They set out to thwart this terrible scheme, but must outwit not only the cream of the German Navy, but the feared Kaiser Wilhelm himself.
Language of the review:
  • es
July 27, 2022
2 of 2 users found this review helpful
No sé de dónde sacaron el título los encargados de ello pero está claro que no vieron la película. Ni playa, ni calas, ni ensenadas, eso sí, mar, de acuerdo. Y también algo de ambiente de puerto pesquero en alguna secuencia, que se ve que son más o menos iguales en la mayor parte del mundo. El muelle, la tasca y las gaviotas.

Ese es el aspecto de la película, netamente marinera, de cuando Alemania pretendía llegar a ser una potencia marítima igualable a su vecina Inglaterra, en tiempos del Kaiser y de las innumerables alianzas que provocaron la primera guerra mundial.

La intriga se presenta cuando Davies, que se dedica a ver a los patos y a tomar nota en cartas náuticas por las costas de Alemania, conoce a Clara y a su padre el señor Dollman. Luego a Davies se le sumará su amigo en la facultad de Oxford y los dos se verán envueltos en una especie de misterio que ronda al señor Dollman y a sus colegas. Creo que la película avanza correctamente pero no engancha lo suficiente como para que esa intriga llegue a ser apasionante, a pesar de tener esos alicientes tan propios de las conspiraciones secretas, incluyendo a extraños personajes y al mismísimo Kaiser. No hay mayor aventura que dos amigos descubriendo sin querer una de ellas. Ya me gustaría a mí andar metido en una. Lamentablemente, y aunque el desarrollo de la acción y la dirección están bien, creo humildemente que no apasiona ni en el aspecto romántico, que es lo más grave. Tres años antes, en Ha llegado el águila (1976), Jenny Agutter sí que creó un conmovedor idilio con Donald Sutherland, efímero pero intenso, esa vez en las costas de Inglaterra, en la esquina opuesta del mar del Norte de donde aquí sale.
floïd blue
Did you find this review interesting and/or helpful?
arrow