Pues la verdad es que para ser la película peor valorada por la crítica y el público asiduo del enfant terrible de Hollywood, no está nada mal, bemoles.

Posiblemente influya el hecho de que la haya visto en versión original, sí, no lo discuto. Es lógico que a los buenos usuarios de esta página las protagonistas les parezcan niñatas retrasadas y mongólicas que sólo saben hablar de pollas. Con el penoso doblaje que seguro que les habrán endiñado, pues la impresión que pueden generar es esa, no cabe duda.

Pero al fin y al cabo, la película sigue el arquetipo de todas las anteriormente realizadas por el director nacido en Knoxville, Tennessee. Fragmentación de la historia en capítulos, varios grupos diferenciados de personajes, algunos de estos mueren brutalmente, otros sobreviven, lo que les da lugar a que puedan llevar a cabo su particular venganza, en fin, nada nuevo bajo el sol Tarantiniano.