En la línea Match Point, me fascina cómo refleja Woody Allen le mezquindad humana. Hasta los más eruditos se mueven más por motivos que por razones.

No tenía ninguna gana, pensaba sería puro marketing. Y me ha encantado. Además de haber pasado un gran rato, los guiños a la original me han parecido muy bien traídos, consiguiendo evocar la que para muchos de mi generación fue una experiencia inolvidable, en 1993.