Película lineal, equilibrada, sin cambios bruscos, no sucede nada de lo que te puedas sorprender. Los actores muestran los mismos gestos siempre, tanto si muere alguien como si no. Merece la pena la actuación de Joaquin Phoenix (de lo mejor)y la ambientación de finales de los 50.
Es una película que puede pasar para muchos desapercibida, pero que no obstante te muestra realmente que la posición social y económica de las diferentes familias, repercute en la vida de éstas en relación a la sociedad que les rodea. Se juega también con los sentimientos de las personas en las vidas amorosas de cada uno y se muestra como el deseo de venganza tiene repercusión en la vida de dos familias en lo que a relaciones sentimentales se refiere.
Definitivamente podríamos definirla como una película "correcta".

...una bandera que quiso ser protagonista en un film donde el argumento de ésta es el mismo que otras películas nos ofrecen. Resulta cansino la falta de originalidad de los directores a la hora de elegir el "plot" de su propia creación; como ocurre aquí, ya que la creación e imaginación brilla (en parte) por su ausencia. En las películas bélicas, lo fácil es recurrir a la II Guerra Mundial, habiendo otras guerras que en su día también adquirieron importancia y protagonismo y que actualmente se reflejan en nuestra historia. En esta película destaca "casualmente" la bandera norteamerica en todo momento por no hablar de los actos a los que acuden los protagonistas por levantar la dichosa bandera entre unos pocos, ¡y esto es lo único que le da protagonismo al film!.

Dejando de un lado todo esto,destaca la fotografía, la ambientación, el papel de los actores que en mi opinión han realizado un brillante trabajo a pesar de la poca experiencia y por la juventud de muchos de ellos, ya que han sabido ponerse en la piel de soldados que luchaban por su país, aunque la mayoría de ellos perdieran la vida. Me resulta asombroso la capacidad de lucha que tenía, y se me eriza la piel al pensar que cada uno de ellos tenía esperanza e ilusión tras esa guerra, pensando que conseguirían la victoria aunque fuera arriesgado, y la pena al fin y al cabo, es que se jugó con los sentimientos de estos soldados y de sus familias que tuvieron que vivir en primera persona la angustia y la amargura de la muerte de un ser querido, que murió luchando por un país y que ni siquiera los que tenían poder pensaban que esos soldados tenían sentimientos y eran utilizados como objetos para aumentar más así su ambición de poder. Muy triste.