Es cierto que se pasean por el film varios clichés (probablemente reales, dado que la directora del film y la autora de la obra teatral en la que se basa son latinas) sobre los latinos que viven en EEUU, pero eso no quita que se nos cuente una historia humana con eficacia.

Además, el film tiene un toque de credibilidad que le hace subir enteros (verbigracia: ese chaval WASP que se enamora de la protagonista... ¡Es algo totalmente posible!) y cierto sentido del humor (verbigracia 2: ese momento en que varios personajes femeninos airean sus carnes sin verguenza alguna por tener sobrepeso) que humaniza la historia.

Una película que consigue los objetivos que se propone.

Buen trabajo.