A estas alturas en las que la animación ha dado pasos agigantados y ya es francamente difícil sorprender al respetable, afrontar una superproducción de 60 millones parece un poco incompatible con los conceptos de "animacion" y "española".
Intentos fallidos los ha habido a montones, recordemos el lince banderiano, que prometía mucho más de lo que acabó ofreciendo, pero también es cierto que el cine español, al menos en coproducción también nos depara buenas sorpresas.
Es el caso de "Planet 51", una película que huele un poco a añejo. No destaca en el plano visual todo lo que debiera, pero el resultado es más que agradable.
La historia tampoco es para tirar cohetes, salvo por el hecho de que nosotros los humanos de Obama seamos los E.T.s...
En definitiva, una película extremadamente infantilona, pero disfrutable a tope, con humor blanquísimo y personajes enternecedores.
¡Qué ganas de llevar a mi Carlitos a una de estas!