El despertar a la vida laboral tiene su riesgo y los profesores que tengamos (compañeros y jefes) serán nuestro ejemplo durante un periodo sensible y más o menos largo.

En este caso Alfonso (Giovanni Ciccia) tiene un "gran maestro" que le enseñará todos los secretos para triunfar en la profesión de periodista pero no le marcará ningún código de honor ni le indicará unos límites éticos durante su aprendizaje, y él es un alumno aventajado que parece obviar hasta sus propios reparos morales.

Las lecciones que Alfonso aprende de su "maestro" en la vida privada tampoco son muy edificantes.

Interesante temática que sin embargo no llega a emocionar en casi ninguna escena. Atractivo Giovanni Ciccia y en general los actores estuvieron bastante bien en sus papeles.

Debo decir que me gustó mucho, en relación con esta película, una fuerte crítica hecha en esta misma base de datos y titulada "Aprendiz de capullo".