Neil Jordan es el encargado de realizar la adaptación al cine de la saga literaria mítica de los años 90 creada por Anne Rice.
La autora es la encargada de realizar el guión de este film, así que su adaptación refleja bastante bien la esencia de la obra. Una obra que ha creado millones de fans, los cuales han seguido apoyando esta película.
La historia engancha desde el principio, y te adentra en el mundo oscuro de los vampiros, pero con toques románticos y decadentes. Una historia que encandila y enamora gracias a una trama que no decepciona.
El director se rodea de un reparto de lujo. Empezando por os estrellas consagradas (Brad Pitt y Tom Cruise) que realizan un trabajo bastante bueno. Ambos dan vida estos dos vampiros antagónicos pero que con pasiones similares. Una atracción en cierto modo homosexual, pero tapado por otras atracciones.
Junto a ellos Antonio Banderas, el cual realiza un trabajo bastante aceptable. Su papel no desmerece nada del trabajo de sus compañeros. Junto a ellos tres el gran Stephen Rea, el cual no realiza un papel muy extenso, pero es suficiente para dar derroche de su enorme talento. Este cuarteto lo cierra el joven Christian Slater, un joven que no decepciona nunca pero tampoco destaca en demasía.
Por último hacer mención al gran descubrimiento de este film: hasta la fecha la desconocida Kirsten Dunst. Una joven de enorme talento que se dio a conocer con su papel de joven vampiro, y que dio una lección de interpretación.
En fin, nos encontramos ante una de las películas míticas de los años 90 que sigue siendo totalmente actual. El tiempo no pasa por ella y sigue encandilando e hipnotizando. Uno descubre ese mundo paralelo de los vampiros, en el cual existen algunos que no ven a los humanos como simple comida. Unos vampiros con sentimientos terrenales y con pasiones de ultratumba. Una historia de amor y terror, que nos lleva a través de un viaje por varios siglos de historia.