La serie me parece de una hechura muy buena. Pero..... pero..... los continuos cambios temporales impiden: disfrutarla, concentrarse, vivirla.... Cuando estas metido en un momento de la vida de Picasso viene el cambio temporal y vuelta a empezar. No es que este mal cada momento, están muy buenos. Pero es imposible vivirlos pues el director corta y sigue con otra línea temporal, y lo más estúpido vuelve a lo mismo que dejo. Es que nadie le dijo, que ÉL no es Picasso. Que queremos vivir, conocer la vida de Picasso pues su obra ya la conocemos. Hubiera sido una genialidad. Tan solo si con el material que tenía lo usara en forma lineal. Una gran pena. Una gran tristeza. Una gran rabia.
Por supuesto Antonio Banderas no parece poder con el personaje. Un único rostro para todo. No es Picasso. Le falta nervio. Le falta genialidad. Le falta también alegría de vivir. Parece eternamente triste. No parece ser el Picasso que mucho recordamos.