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Reino Unido Reino Unido · Edinburgh
Voto de JonGS:
7
Drama Chad, en la actualidad. Adam, sesenta y tantos años, antiguo campeón de natación, es profesor en la piscina de un hotel de lujo en N'Djamena. Cuando unos empresarios chinos adquieren el hotel, se ve obligado a dejar su puesto a su hijo Abdel. Sufre mucho con esta situación, que considera como una decadencia social. El país es presa de la guerra civil y los rebeldes armados amenazan el poder. El gobierno, como respuesta, recurre a la ... [+]
25 de septiembre de 2011
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Una persona que grita, es una película que relata la tragedia de la guerra civil en Chad de una manera sencilla, costumbrista, y situando la cámara como espectadora de la historia sin tratar de manipular en ningún momento al espectador a través de sus posibilidades técnicas.

Adam Ousmane (Youssouf Djaoro) al que sus amigos llaman “Champion” por un título mundial que ganó como nadador para África en 1965 trabaja en un hotel de Chad junto a su hijo Abdel Ousmane (Dioucounda Koma) . Los dos atienden la piscina del hotel, algo que para Adam es muy importante y a lo que ha dedicado toda su vida.

La película esta dividida en tres actos que no están remarcados por el autor pero que actúan como hilo narrativo de la historia: el destierro, el rencor, y el arrepentimiento. En el primero vemos la preocupación de Adam por sentirse mayor y en desigualdad de condiciones frente a su hijo para seguir desarrollando su trabajo, posteriormente entrará en una fase de distanciamiento de su familia, y finalmente se sentirá arrepentido de sus actos.

En lo que es una crítica directa a la política y la situación en el país Adam comentará a su mujer “no soy yo el que cambia, es el mundo el que esta cambiando”. Relacionado con esto último, Mahamat-Saleh Haroun comentó como la guerra civil afecta la vida privada de las personas y la violencia se convierte casi en algo cultural.

Es de destacar la verosimilitud de la puesta en escena y la forma sosegada de mostrar la vida de los protagonistas en contraposición con esa dureza que se puede sentir en el trasfondo, la música extradiégetica es prácticamente inexistente durante toda la película lo que viene a confirmar esa economía narrativa y visual que de manera acertada ayuda a crear una atmosfera que da realismo a la historia.

En contraposición con el cine asiático que desde hace años esta de moda en festivales de todo el mundo el cine africano es de más difícil acceso, por ello es de agradecer que esta película fuera incluida en el Festival de Cannes del 2010 en su sección oficial.
JonGS
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