Absolutamente todo está mal en “D-Railed”. Y no de ese mal que te provoca risa si la ves en compañía (incluso solo). No, estamos hablando de algo tan malo que ni da risa. La historia es un delirio que salta de un lado a otro sin lógica. Los actores son de quinta división. La manufactura es como darle a tu sobrino de cinco años una cámara y pretender que lo que grabe te hará ganar un Oscar como productor. La película está hecha con desgana, narrada sin talento, como una especie de batiburrillo donde lo único que buscaban era tener un vagón de tren sumergido y una criatura para ponerlo en un cartel junto al gancho de Lance Henriksen que apenas aparece unos minutos y no aporta nada. La historia del tren bajo el agua y la criatura apenas dura diez minutos porque el resto es algo así como un robo en un tren temático, ei es que lo he comprendido bien porque está tan mal contada que también podría estar explicando como hacer bacalao al horno y el resultado habría sido el mismo porque aquí, como he dicho, lo único que pretendían es tener un cartel de un vagón de tren y un monstruo submarino y el nombre de Lance Henriksen en él. Respecto a la conclusión de la película, voy a evitar spoilers, solamente deciros que está totalmente fuera de lugar (algo coherente con el resto de la película.

Todo es un despropósito, esto no es ni serie B ni serie Z sino un subproducto sin la menor personalidad que no sirve ni para echarnos unas risas.