Beatrice y Donatella emprenderán un viaje iniciático, en el que ambas se confesarán y se descubrirán un poco más. Un viaje precipitado. Una forma de escapar de una realidad que constriñe sus sueños y que coarta sus alas, muy al estilo del que hacían Thelma y Louise en la mítica película de 1991. Son muchos los elementos comunes que comparten las dos cintas, como el tratamiento de la violencia hacia las mujeres. En la cinta de Ridley Scott era más clara (tenían que matar a un hombre ante el intento de abuso), aunque en Locas de alegría también está muy presente. Ya hemos mencionado las tormentosas relaciones con los hombres que tienen las dos protagonistas. Una forma de violencia, no física, pero responsable de grandes heridas psicológicas. Además de secuencias en la trama que vuelven a resaltar esa violencia. Significativa son las secuencias con el hombre del Fiat, en la que vemos a un tío que ante la presencia de dos mujeres jóvenes y guapas, solamente se le ocurre intentar abusar de ellas. A lo que ellas responden con el robo del Fiat y una huida hacia delante. Beatrice y Donatella están hartas de sufrir estragos por su condición de mujeres y se refugian en un mundo de fantasía, en el que se sienten más a salvo.
Además resulta digno de alabar que se haga una película sobre los problemas mentales de forma tierna, pero sin obviar la cruda realidad que sufren estos enfermos. Por mucho que Beatrice se crea la persona más influyente de Italia, tiene que compartir techo con mujeres inestables, que por la noche sufren ataques de ira o de confusión y con otras mujeres que viven en un ambiente de perpetua desorientación. En este sentido la película no obvia la crítica social, con un centro en el que sus responsables en ocasiones están desbordados y cuyas enfermas muchas veces no reciben un trato adecuado y personalizado. Al mismo tiempo son varios los momentos en los que Beatrice, en un contexto disparatado y humorístico, mete pullitas acerca de los robos protagonizados por los bancos o la situación de muchos desfavorecidos.
Más en planoamericano.wordpress.com