Y es que films como este son los que nos faltan entre los realizadores patrios. Aventuras, entretenimiento... no rebuscar una y otra vez en la guerra civil, ni en las injusticias sociales (va por tí, Aranoa) o en el cine zafio... de vez en cuando al cine se va para pasar hora y media de distracción. No siempre tu alma te pide ver cosas como The fighter o Cisne Negro.
La película cumple, con un prólogo ambientado en las cruzadas y el típico desarrollo de viaje con sorpresa final.