Con distintos países y luchas políticas, pero este film parece estar siempre actualizado. Ha sido duro volver a ver esta película. Durante su meridiano, cuando estalla la locura en las calles y se palpa el temor de que algo horrible va a acontecer, es el momento mejor conseguido. Tiene un toque casi documentalista cuando retrata a los militares que van perfilando el ataque a bordo de un avión, muy parecido a lo que Greegrass hizo en United 93. Después... no queda sino dolor, desesperanza, y horror... con algunas notas de esperanza como el grito de un recién nacido que bien puede ser de angustia ante el mundo en el que nace. Para ver y no olvidar. Que la sombra de una guerra así se mantenga siempre alejada de nosotros y esta película ayude para ello.