No sé si es bueno o malo pensar que esta es la mejor peli western que veré a lo largo de mi vida. Quizá parezca prematuro decir esto, pero dado que es una película perfecta, y es la única que me hace sentir todo lo que sienten los personajes, me río cuando ellos ríen, me tenso cuando ellos se tensan y sufro cuando ellos sufren. Y además, muestra sus intenciones desde el principio con la gran escena del robo al banco, no esperándote que la escena final sea aún más estremecedora. Y qué decir de los personajes del film, magníficamente llevados por Peckimpah, extraordinariamente interpretados, pero sobre todo por Jaime Sánchez, que hace, desde mi punto de vista, una de las mejores interpretaciones que he visto en mi vida, donde en una escena lo dice todo sin abrir la boca; personajes que te enseñan que aunque sean delincuentes y ladrones, tienen su orgullo y su sentido del honor.
Ahora entiendo porque le llaman Grupo Salvaje al film, porque son todos salvajemente buenos, desde el director hasta él cámara, como diría un amigo mio, hasta es bueno el cartel. Es un western salvaje. Gracias Peckimpah, por esta obra de arte, porque por obras como esta, el cine está salvado.