En el marco de la parte final de la II GM el ejército italiano ocupa la isla griega de Cefalonia donde el conflicto se vive de lejos.
Tan de lejos que menudean las fiestas de confraternización entre ocupantes y ocupados, aprovechando sobre todo la vena musical de los soldados italianos. La batuta la lleva el capitán Corelli (Cage) como director del coro militar y consumado mandolinero, que no carabinero.
La música, la gracia y la escasa bizarría que muestran los italianos, van poco a poco derribando las barreras de desconfianza que habían levantado los griegos. También las sentimentales de Pelagia (Cruz), la hija y enfermera del doctor Iannis (Hurt) ex prometida de Mandras (Bale), pescador y jefe de la resistencia local.
El guion es muy flojo, con demasiado caramelo en la resolución. Tampoco la realización está a altura con los personajes, todos regularmente pergeñados e interpretados.
Pero no neguemos a Penélope el tango que baila con el soldado. Espectacular. Como aquel "Tango italiano" que cantaba José Guardiola cuyo comienzo dejamos en spoiler, que también habla de mandolinas y de amores lejanos.
Melodrama más musical que bélico que, de paso, nos permite conocer las tradiciones y las bellezas naturales de las islas griegas.
Pasable.