En todo thriller, ya sea psicológico o de otro tipo, hay un elemento fundamental que es el que se encarga, para bien o para mal, de marcar el devenir de la cinta. Dicho elemento es el desenlace del film, marcado por el giro final.
"El cuerpo" es un thriller psicológico que circula por el camino establecido sin salirse de el, apenas regala concesiones a lo inesperado durante los dos primeros actos, todo lo inesperado se lo guarda para la conclusión de la historia. Durante esos dos primeros actos se le pueden achacar muchas cosas, como por ejemplo ser un film excesivamente correcto, o que siendo una cinta de misterio le brillen mas los momentos policiacos que los de terror, con lo cual se diría que le faltan sustos.
Pero todo ello pasa a un segundo plano una vez que el espectador llega al tan ansiado desenlace, que dicho sea de paso a mi me convenció. Es un giro final que hace que el espectador tenga que tirar a la basura todos los posibles finales que iba imaginando, y lo hace sin que resulte estridente. Bravo por Oriol Paulo, esta saliendo una nueva generación de realizadores que además de conocer las claves del cine al que quieren dedicarse, las utilizan en beneficio de la historia.
En resumidas cuentas, "El cuerpo" es un thriller que podría resultar corriente si no fuera porque mejora muchísimo a medida que avanza, y mucho más con su desenlace. Aunque, claro esta que esto es a gusto del espectador, entiendo al que opine todo lo contrario.