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Voto de Frank Booth :
8
7,6
46.518
Drama
Para Jack, un niño de cinco años, la habitación es el mundo entero, el lugar donde nació, donde come, juega y aprende con su madre. Por la noche, mamá lo pone a dormir en el armario, por si viene el viejo Nick. La habitación es el hogar de Jack, mientras que para su madre es el cubículo donde lleva siete años encerrada, secuestrada desde los diecinueve años. Con gran tesón e ingenio, la joven ha creado en ese reducido espacio una vida ... [+]
11 de mayo de 2020
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un melodrama sin parangón, refinado y pulido hasta la excelencia, nada se puede decir de una película que te encoje el corazón desde el primer minuto hasta el último. Los culpables son la dirección admirable de Lenny Abrahamson y el guion minucioso de Emma Donoghue, sin hablar de las interpretaciones; Jacob Tremblay está increíble, uno de los mejores papeles infantiles que he visto en la gran pantalla y Brie Larson no se queda atrás, con un talento implicado, visceral y afectivo.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Aunque la película es una proeza toda en sí, se vale de dos fases muy diferenciadas para contar esta historia sobre el horror más exacerbado, con un trasfondo cultural acerca de la conmoción que provocó al mundo el caso del monstruo de Amstetten.
Los primeros 40 minutos de película son sublimes, la maestría de como en una habitación tan pequeña se puede transmitir tanto es inexplicable, el relato se convierte en una tesis sobre la resiliencia humana y su capacidad de adaptación al entorno tan real que estremece por su naturalidad.
La segunda parte ya abre más prerrogativas, pero encauza con solvencia el melodrama del trauma de la liberación y del recuerdo permanente que marca los hitos del destino humano. Preciosa escena en que la madre al borde de la rendición mediante el suicidio vuelve a casa gracias al regalo del pelo de su hijo.
No suficiente con esto, al final hay una reflexión preciosa del niño al volver a visitar la habitación de su cautiverio “La habitación solo existe cuándo la puerta esta cerrada” por lo que señala que la habitación es la metáfora de todos lo intangibles que nos niegan la autonomía personal y que encierran las emociones por su cauce natural del libre desenvolvimiento. Ahora, solo queda en la memoria como en recuerdo profano, como una lección aprendida, como una historia de superación.
Los primeros 40 minutos de película son sublimes, la maestría de como en una habitación tan pequeña se puede transmitir tanto es inexplicable, el relato se convierte en una tesis sobre la resiliencia humana y su capacidad de adaptación al entorno tan real que estremece por su naturalidad.
La segunda parte ya abre más prerrogativas, pero encauza con solvencia el melodrama del trauma de la liberación y del recuerdo permanente que marca los hitos del destino humano. Preciosa escena en que la madre al borde de la rendición mediante el suicidio vuelve a casa gracias al regalo del pelo de su hijo.
No suficiente con esto, al final hay una reflexión preciosa del niño al volver a visitar la habitación de su cautiverio “La habitación solo existe cuándo la puerta esta cerrada” por lo que señala que la habitación es la metáfora de todos lo intangibles que nos niegan la autonomía personal y que encierran las emociones por su cauce natural del libre desenvolvimiento. Ahora, solo queda en la memoria como en recuerdo profano, como una lección aprendida, como una historia de superación.