Ciertamente la película pasa de esa etiqueta de "interesante", la cual es la que solemos utilizar para todo ese tipo de películas que nos hacen pasar un buen rato pero que no llegan a más. Duncan Jones ya mostró ambición con Moon, y su Código Fuente está claramente hecha para aspirar a mucho más que un simple interesante.

La película en verdad es un notable ejercicio sobre un tema que más o menos siempre está de moda, los viajes en el tiempo. Jake Gyllenhaal encarna a un personaje interesante, pero no por sí mismo si no por la historia que le acompaña. Se abren muchas incógnitas y sabemos, desde el primer minuto, que esos planos tan detallados de cómo un hombre está hablando por teléfono o cómo se le manca el zapato a nuestro protagonista van a cobrar luego relevancia en cierta manera.

El problema es que lo de los viajes en el tiempo, aunque aquí no sea como tal, ya empiezan a estar un poco trillados, y Duncan Jones tampoco es que aporte nada especialmente diferente. Eso, sí, todo lo que nos muestra es muy bueno, pero aunque parezca una película arriesgada yo tuve la sensación de que precisamente lo quele faltaba era precisamente más riesgo.

El final fue lo que me hizo reducir mi percepción por la película. No sé muy bien la razón pero esperaba un gran final, y el que vi me decepcionó en cierta manera. Tampoco es que esté mal, pero esperaba uno de esos que te dejan boquiabierto. Todo transcurre más o menos como puedes pensar desde el comienzo de la película, por lo que no tendremos sorpresas remarcables.

Es una buena película, sin duda, pero le tenía mucha más fe. Quizá en un universo paralelo Duncan Jones ha hecho una verdadera obra maestra con su Código Fuente, pero en esta realidad se ha quedado un poco a medio camino. Con Moon me pasó algo distinto. Quizá el problema sea mio por tener en mente que está llamado a hacer una señora película de ciencia-ficción, que por desgracia por el momento todavía no ha llegado.