Esta claro que no es un peliculón;
No es la mejor interpretación de Daniel Brühl ni de Héctor Alterio.
Tengo que decir que la película tiene momentos que no engancha al espectador porque no conecta pero es una película que te hace pensar en la inocencia de los seres humanos, de las personas y te hace tener unos pequeños momentos de ensoñación.
Y que a todos nos gusta sacar esa ñoñería de vez en cuanto!!
Se merece un 10 de sentimientos, sencillos pero sentimientos, que la sencillez es una virtud, no? pues eso.