Si digo que esta serie está bien escrita, me quedo corto. Los guionistas son absolutamente increíbles... Qué diálogos, joder. Menuda inteligencia que tienen que tener para escribir esas conversaciones... Y no solo a nivel de diálogos destaca la serie, a nivel de argumento es acojonante. Es lo menos previsible que he visto en mi vida (amén de Juego de Tronos). Está todo perfectamente hilado y perfectamente retorcido. A veces me paro a pensar... "¿Cómo pudieron escribir algo así? Primero establecen el alocado giro argumental y a posteriori le buscan coherencia, o planean la coherencia oculta mediante un entrevesado giro argumental?". Es algo que me intriga, la verdad. Esta es de esas series en las que las entrevistas publicitarias no deberían darlas los actores principales, sino los asombrosos guionistas.

Es cierto que la cara de Cumberbach es rarísima, rarísima, y al principio cuesta hacerse a ella porque casi roza el valle inquietante (un apunte: "Una vez un periodista me dijo que tenía cara de extraterrestre. Y como no supe qué decirle, le di las gracias". BC dixit), pero con el paso de los capítulos, como lo familiar agrada, te haces a él.

Una diferencia que he notado entre los libros y la serie es que los secundarios adquieren un mayor peso en la trama, lo cual se agradece, porque disminuyen la saturación que pudiera provocar un "sociópata bien integrado" durante hora y media de metraje por capítulo, algo parecido a lo que ocurre con The Big Bang Theory.

Y el último elemento que destaco de la serie son los maravillosos villanos. Todos desprenden un poder inmenso. En ningún momento se siente que no vayan a ser rivales para el archifamoso Sherlock Holmes.


PD: Una curiosidad peculiar, para los que sigan la serie con doblaje en castellano, es que el otro día estaba en la cocina y oí la voz de Sherlock en la tele llamando a un tío que se llamaba Watson... ¡¡Y curiosamente era Sherlock Holmes!! Y el otro, Watson XD. Pero... no era esta serie. Es decir, el mismo actor de doblaje ha doblado a Sherlock Holmes en diferentes títulos. ¡Me parece un gran detalle!