Black and blue es una película de acción y suspenso, dirigida por el no tan reconocido cineasta estadounidense Deon Taylor.

Alicia (Naomie Harris) regresa a su ciudad natal para convertirse en policía. Cuando comienza a patrullar por las calles es testigo de un crimen cometido por uno de sus compañeros y varios policías más, los agentes se percatan de su presencia e intentan matarla, comenzando así una casería a muerte.

Taylor nos presenta un thriller sobre la decadencia de una ciudad y sus habitantes y todo lo que esto acarrea (anarquía, pobreza, falta de ley, abusos y discriminación por parte de la policía).

El film no cuenta cosas nuevas, nada que no se conozca ya o no se haya abordado en cuanto a la situación de la comunidad afroamericana y la policía. Además, la película se siente como muy parcializada, como si solo contara un lado de la historia.