Louisiana, uno de los estados sureños donde la temperatura y la humedad se hacen realmente insoportables, donde el hielo es oro, y donde hidratarse, con o sin alcohol, es fundamental.

Añejo cine negro, perfectamente ambientado en las localizaciones donde su autor, James Lee Burke, escritor de folletines de cine negro y creador del personaje del policía de homicidios Dave Robicheaux, que interpreta Alec Baldwin, un ex alcohólico y excéntrico teniente que dejó su puesto a causa de su adicción, se ve involucrado en un asunto de ajuste de cuentas entre mafiosos, y su instinto policial le hace inmiscuirse en ellos.

Además de la ambientación perfecta, de su excelente banda sonora, la película cuenta con el atractivo añadido de disfrutar de tres lindas mujeres, sobre todo de Teri Hatcher, conocida por su papel de "Mujeres desesperadas", en quizás su mejor actuación, a las que hay que sumar a Kelly Lynch y Mary Stuart Masterson, y también, cómo no, a un sobreactuado, como siempre, Eric Roberts.

No es una obra de arte, pero es una genuina muestra del cine negro con ese savoir faire y esa impresión de que algo se queda siempre en el tintero, indefinido, insustancial, inconcluso.

Notable, 7.