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Voto de Jab:
10
7,7
2.661
Thriller. Cine negro. Drama
La hija del presidente de una importante empresa inmobiliaria se casa con Nishi, el secretario de su padre. Durante la boda, ciertos rumores y comentarios circulan entre los invitados: cinco años antes, cuando un hombre murió tras caer por la ventana del último piso del edificio de la compañía, mucha gente dudó de la versión oficial, según la cual se había tratado de un suicidio. (FILMAFFINITY)
13 de agosto de 2017
12 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lenta, pero magnífica, no tiene nada de relleno ni se enreda en ningún momento en trivialidades, lenta, pero directa al corazón, al intelecto, a la conciencia. (Tal vez el espectador occidental esté acostumbrado a largometrajes más cortos y con mayor ritmo y por ese motivo la mayoría no disfruta del cine del Gran Maestro Kurosawa, no saben lo que se pierden). Pero a pesar de su ritmo lento, al final llega a la meta, como la tortuga, ganando a todas las liebres del mundo, triunfal, dejándonos todos los cabos atados, el camino llano, con todo detalle, siendo en todo momento una trama verosímil, no dejando nada al azar.
Como siempre encuadres cuidados al milímetro, un blanco y negro sublime, la luz en su sitio, como si fuese un cuadro en movimiento. La historia deja el más amargo sabor de la realidad, tenemos un casi héroe, una casi justicia, una casi venganza, un casi final feliz, pero todo se queda en casi, como en la realidad. La trama bucea, como nos acostumbra Kurosawa, en lo más profundo del ser humano, en sus sentimientos. Esta vez nos sumerge entre en la delgada línea del odio y del amor, de la maldad y la bondad, de lo que está bien y de lo que está mal, y como el ser humano no es perfecto, duda, porque como dice el Señor Wada "odiar no es natural". Kurosawa sabe jugar a la perfección con los sentimientos del espectador, sabe darnos lo que creemos que haríamos el 99% de los humanos si viviésemos la misma situación que Nishi, venganza, pero también la duda, porque matar no es fácil, odiar no es fácil, vengarse no es fácil, tan sólo en el cine o en la imaginación, pero no en realidad y el Maestro nos ofrece siempre grandes dosis de realidad. Y así es como se balancea la película, entre los momentos de final feliz y la realidad, de un extremo a otro, hasta que termina donde terminan casi siempre las cosas en la vida real, con los canallas durmiendo en paz, tranquilamente, riéndose del pueblo.
(5 cosas que me encantaron en el Spoiler.)
Como siempre encuadres cuidados al milímetro, un blanco y negro sublime, la luz en su sitio, como si fuese un cuadro en movimiento. La historia deja el más amargo sabor de la realidad, tenemos un casi héroe, una casi justicia, una casi venganza, un casi final feliz, pero todo se queda en casi, como en la realidad. La trama bucea, como nos acostumbra Kurosawa, en lo más profundo del ser humano, en sus sentimientos. Esta vez nos sumerge entre en la delgada línea del odio y del amor, de la maldad y la bondad, de lo que está bien y de lo que está mal, y como el ser humano no es perfecto, duda, porque como dice el Señor Wada "odiar no es natural". Kurosawa sabe jugar a la perfección con los sentimientos del espectador, sabe darnos lo que creemos que haríamos el 99% de los humanos si viviésemos la misma situación que Nishi, venganza, pero también la duda, porque matar no es fácil, odiar no es fácil, vengarse no es fácil, tan sólo en el cine o en la imaginación, pero no en realidad y el Maestro nos ofrece siempre grandes dosis de realidad. Y así es como se balancea la película, entre los momentos de final feliz y la realidad, de un extremo a otro, hasta que termina donde terminan casi siempre las cosas en la vida real, con los canallas durmiendo en paz, tranquilamente, riéndose del pueblo.
(5 cosas que me encantaron en el Spoiler.)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
El comienzo parece muy lento y seguramente muchos espectadores dejaron de verla en la primera media hora, pero es que está cargada de detalles e información que se van desplegando para que la comprendamos y para no dejar ni un cabo suelto al final.
La humanidad de los vengadores. Wada y Nishi no pueden soportar sobre sus hombros el peso de la venganza tal y como les gustaría hacerlo, y eso les hace humanos, los hace reales y cercanos al espectador. Por suerte esto no es The Punisher.
Jamás es pretenciosa ni muestra limitaciones en su guión ni es su aspecto visual. Cine negro del bueno, directo a donde más duele, nunca pierde su rumbo, que siempre está fijado desde el título.
Nos hace odiar al malo malísimo, el Señor Iwabuchi, para después ofrecernos un final en el que se ve que Iwabuchi no es más que un pelele, que finalmente pierde a sus hijos, su estabilidad y tiene que dejar su trabajo. ¿Cómo serán los superiores?. Mejor ni saberlo, fue un gran acierto dejarlo para el final y no hacer un film pretencioso tratando de abarcar más de lo que puede.
Desgarrador el desahogo del verdadero Nishi cuando matan a su mejor amigo, que lejos de lamentar solamente su muerte, lamenta aún más la muerte de la justicia.
La humanidad de los vengadores. Wada y Nishi no pueden soportar sobre sus hombros el peso de la venganza tal y como les gustaría hacerlo, y eso les hace humanos, los hace reales y cercanos al espectador. Por suerte esto no es The Punisher.
Jamás es pretenciosa ni muestra limitaciones en su guión ni es su aspecto visual. Cine negro del bueno, directo a donde más duele, nunca pierde su rumbo, que siempre está fijado desde el título.
Nos hace odiar al malo malísimo, el Señor Iwabuchi, para después ofrecernos un final en el que se ve que Iwabuchi no es más que un pelele, que finalmente pierde a sus hijos, su estabilidad y tiene que dejar su trabajo. ¿Cómo serán los superiores?. Mejor ni saberlo, fue un gran acierto dejarlo para el final y no hacer un film pretencioso tratando de abarcar más de lo que puede.
Desgarrador el desahogo del verdadero Nishi cuando matan a su mejor amigo, que lejos de lamentar solamente su muerte, lamenta aún más la muerte de la justicia.