Haz click aquí para copiar la URL
Rusia Rusia · Stalingrado
Voto de Ferdydurke:
5
Documental Zannou repasa la historia de la selección española de fútbol desde su nacimiento a principios del siglo XX hasta la brillante etapa actual (2009), cuyo punto de partida es la Eurocopa de 2008. Por la pantalla desfilan importantes figuras del futbol español, desde Di Stéfano, Ramallets, Pepe Claramunt, Víctor Muñoz, Luis Aragonés, Vicente Miera o Luis Suárez hasta Fernando Torres, David Villa, Iker Casillas, Cesc Fàbregas, Fernando ... [+]
31 de octubre de 2016
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
El leitmotiv, un tanto sensiblero (esa musiquita tan bonita de los cojones) a la par que emocionante, es el reencuentro de viejas glorias (hoy día desgraciadamente muertas varias de ellas), en concreto de Ignacio Eizaguirre con antiguos compañeros suyos (Puchades, Ramallets, los tres fallecidos el mismo año 2013, unidos también en eso, ... ) de correrías futboleras. Es el macguffin necesario en este caso para hablar de la historia de la selección española. Desde 1920 hasta justo después de conseguir la segunda Eurocopa (2008) y antes de lograr el primer y único, por el momento, Mundial (2010), es decir, 2009.
Muchos desastres y algún pequeño éxito. Un país que hasta hace nada padecía una tremenda desproporción entre el interés, la atención, el dinero y los medios que dedicaba a este deporte y los raquíticos resultados conseguidos. Tras estas últimas hermosuras, las cuentas se han ajustado un tanto, aunque todavía no del todo, algo nos deben o debe, quien sea el puñetero tan ruin y cicatero, el encargado de todo esto.
Se intercalan añejas imágenes con comentarios de los exjugadores, todos mitos, por muy olvidados que algunos estén.
El fútbol (y la selección especialmente por su valor totalizador, aglutinador y sentimental), es evidente, ha sido en nuestra tierra santa como una banda sonora emocional que ha acompañado a todas las generaciones de chavalotes (las chavalas tradicionalmente no, quizás tampoco ahora, seguramente una muestra irrefutable de su superior sabiduría, de su más evolucionado modo de vida hasta hace nada) que en España han sido desde el siglo veinte en adelante; en esas debacles, esperanzas y desilusiones y nuevos deseos, en ese carrusel casi siempre lastimoso y lacrimoso se dejaron buena parte de sus inocencias y anhelos, de su feliz infancia y turbia adolescencia, fue escuela tempranera y cruel de derrota y decepción, de absurdo y disparate, forja del alma descreída y lúgubre al igual que fullera y bullanguera. Con el paso de los años es un fuego que se atenúa inevitablemente y se convierte en otra cosa, queda reducido a cenizas o escombros que dan calor, pero ya poco o mucho menos, quizás más como añoranza o ideal perdido, también inercia de masa y ruido consolador.
En fin, el deporte (si te olvidas de todo lo malo, es mucho o demasiado pero ahora no viene al caso) en su aspecto más positivo; épica, identidad, generosidad, valor, grandeza, leyenda, inmortalidad; la Ilíada y la Odisea de nuestro tiempo, los Aquiles y los Ulises que nos ha tocado vivir/admirar en esta época descafeinada y limada, tan gris, burocratizada y poco aventurera.
El documental es correcto, mansurrón, agradable, tierno, simple, cariñoso, superficial, escuálido, bonito, tontorrón, tópico y mil cosas más medias, simpáticas y ñoñas que se debaten entre el serio aburrimiento (en el caso de los más severos y racionales ciudadanos) y la lagrimita traicionera y culpable (apta para los más chochos o delicados como flores).
Bueno, en verdad ojalá fuera todo tan así, tan nimio, ligero y facilón. Y, sobre todo, que el final fuera ese paraíso de triunfos, encuentros, grupo y sentido. Claro que sí. Por qué no.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ferdydurke
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow