Pienso que el principal problema de esta segunda parte se debe a sus problemas de ritmo y a su pareja principal.

Es indudable que los momentos Annakin-Padme, son empalagosos, aburridos y faltos de interés para el espectador. Natalie Portman es muy guapa pero es una actriz realmente sosa, y el bueno de Hayden Cristiansen le va al zaga, es por eso por lo que no funciona, dos sosainas sin chispa ni química cuyos momentos de ¨mamoneo¨ no interesan, aburren.

Obi Wan es quien salva la función junto con villanos carismáticos como el conde Dokuu, sus andanzas en el planeta Geonosis, con ese ejercito de insectoides, así como esa batalla de ¨gladiadores¨ en ese adpatación Lucasiana de un coliseo romano, es entretenido, espectacular a ratos, el combate entre Yoda y Dooku, mítico, muchos deseaban ver al ¨maestro¨ de maestros manejando el sable láser, y aunque breve el combate no decepciona.

Por lo demás, profusión máxima de efectos por computadora, algo que dañó gravemente a esta saga, mas ocupada en lo visual, que no contarnos una HISTORIA, que era algo que si hacía en la anterior trilogía, que si lograba que te importaran sus personajes, no como aquí, reducido todo a un batiburrillo de efectos visuales que terminan por hastiar y aburrir

Esa es mi impresión sobre el ataque de los clones, la mas lenta y empalagosa de las tres, con momentos espectaculares y grandiosos,. no lo niego, pero otros infumables y aburridos, un Annakin, con el que se equivocaron de pleno con el actor elegido, un soso sin carisma ni energía y un Lucas que demostró que como inventor de mundos es un genio, pero como director propiamente dicho, deja bastante que desear.