El otro día fui a ver El árbol de la vida (The Tree of Life), el último film del siempre especial Terrence Malick. La verdad es que no sé bien que decir de ella. La único que tengo claro es que es una película especial, de las que dejan poso, pero no sé si llamarla película; creo que es más bien un poema visual. Trata sobre la vida y claro, ¿cómo se puede abarcar tamaña empresa?

El director utiliza la excusa de la muerte de un ser querido para enlazarla con la creación del universo y mostrarnos lo insignificante de nuestra existencia. A continuación se muestran las vicisitudes del ser humano, representada mediante la infancia de tres hermanos (con una interpretación impresionante de los chiquillos) y sus relaciones con su odiado/amado padre (magnífico Brad Pitt) para terminar con la muerte (o la idea del cielo o yo que sé). La ultima parte es difícil de comprender, o sencillamente es incomprensible, como la idea de la muerte y su importancia (¿la tiene en realidad?)

No es una película al uso, es belleza visual, es la vida...

Como habréis podido observar por mi forma de expresarme al escribir, no soy ningún intelectual, ni soy filósofo, ni estoy iluminado, soy un tipo normal al que le ha gustado la película, por lo que sí, a las personas corrientes y molientes también nos puede gustar.

Recomiendo degustar con calma, reflexionar y entonces tomar tus propias conclusiones.