Una vez mas me animo a ver una película de terror de esas de las que se dice son basadas en “hechos reales”, convirtiéndose ésta constante en una motivación que despierta el interés y la expectativa hacia una historia ya contada o mejor dicho, trillada en la trayectoria de la cinematografía de horror.

Como es ya sabido por todos los terrenales, la realidad supera a la ficción a grandes escalas, sólo por este hecho se suponía que iba a apreciar (a juzgar por el tráiler) una película terrorífica de esas que uno no deja de hablar ni de pensar en ella por lo menos por un par de días – cito a manera de ejemplo: El Exorcista, Actividad Paranormal, Encuentro Siniestro y otras bastante interesantes que olvido en éste momento -.

Sorpresivamente, me encuentro ante una película de terror que muestra mas de lo mismo: una historia bastante predecible, personajes planos con características idénticas en referencia a éste tipo de temas de posesiones demoniacas; En términos generales el mismo exorcismo, pero ésta vez llevado a cabo por judíos. Se le abona que pudimos apreciar lo que al parecer es un ritual de exorcismo judío.

Admito que me tensioné un par de veces, pero bueno, eso es lo que logra la edición de sonido y algunos momentos inquietantes que me mantuvieron con ansiedad de ver situaciones novedosas que asustaran mucho, pero mientras permanecía expectante, involuntariamente mi mente no dejaba de predecir lo que iba a ocurrir. Finalmente, éstas sensaciones típicas en los espectadores de un film de terror, se convertía en desilusión ya que me la pasé toda la película prediciendo lo que sucedería e irónicamente sin conocer casi nada de la historia previamente mis predicciones resultaban ciertas.

Para concluir, esto es un llamado de atención para los directores y guionistas: ya no se vale tener que recurrir a la frase “basada en hechos reales” para aludir y atraer más público a las salas de cine, al fin y al cabo terminamos por darnos cuenta que es únicamente una historia más de ficción producto del “ingenio” de guionistas que no tienen mucho que contar y recurren a referenciar historias ya contadas, repitiendo el tema de familias disfuncionales que tienen experiencias con el más allá, con el fin de terminar siendo funcionales en el más acá, y por supuesto, todo esto lo camuflan gracias la magia del cine moderno en cuanto a efectos especiales y de sonido se refiere.

Calificación : ** (Sobre 5) Pasable.