La película es un chusco, eso no quita que al menos te entretenga y hay mucha agresividad en ella. Mucha sangre, mucho colgado en un campo del sur de EE.UU donde un chaval va con sus amigos super guais a decirle a su padre que es gay (no sabrán comunicarse por teléfono, digo yo). Si bien mola ver tanta algarabía y juventud guapa bailando a lo MTV en un granero y como una y otro se meten mano. No me mola tanto ver a un colgado con una máscara de animal muerto y una orca en la mano a lo Freddy Krueger rústico, que además tiene una familia de locos que lo apoya y que sale al final.

Yo la puse esperando un film distinto y me metieron este sub-producto barato donde se ve textura de cámara digital y donde los actores son una farsa con buen cuerpo y buenos culos. No es para verla, pero al menos te echas el ratillo y al ser moderna no queda muy alejada de uno. Se habla de "selfies", de gays, de acostarse con uno y con otro. El psicótico se pasa mucho con alguna que otra victima (por si eres un poco sádico). Francamente, no es lo peor que he visto, pero de saber como era me hubiera ido a hacer otra cosa. Mejor que "Gholies II" que de vieja que era y de marionetitas que tenía me daban ganas de echar la pota. Un 4.