A mí me ha encantado el personaje de Nicky (Paloma Bloyd). Es vital, alegre, pícaro, tierno y romántico... Yo quiero una tía así también, jajaja. Pero no tengo el aspecto de Daniele Liotti y no creo que guste a ese tipo de mujer que rondará físicamente el 9... Por otro lado, la película, aunque larga, se deja ver. Sus personajes son agradables y divertidos y parecen todos sacados de un anuncio de Pantene o de Movistar (todos guapísimos, delgadísimos y muy amigos). La trama es fácil de seguir, previsible, algo ñoña y poco creíble, pero supongo que para el público al que va destinado (chavalería), es el producto ideal. Está interesante de ver, pero de nota global no merece más de un 4. Ahora sí me guío por el adjetivo que va junto al número, pues sí... Interesante es, para verla una vez y ya está.