"Chantaje", también conocida en España como "La muchacha de Londres", es la primera película sonora de Hitchcock, aunque se rodó una versión silente. No es una gran película, pero resulta desasosegante, y posee diversos aciertos que inciden en la sensación de culpabilidad de la protagonista, en su miedo, en su remordimiento, en su propio infierno, causado por un asesinato que la convierte en asesina y en inocente a la vez, pues está claro que si mata es por defensa propia, por evitar ser violada. Esos aciertos son el anuncio luminoso que se transforma en la mente conmocionada de la protagonista, el "puré sonoro" que repite la palabra "knife" (cuchillo), o el cuadro del payaso acusador: todo ello, además del chantajista, sirve para atormentar a Alice White (Anny Ondra), para convertir su vida en una pesadilla. La persecución en el Museo Británico es otro momento importante en este film.

Aparece ya la "rubia" del cine del director británico -según IMDb, es la primera en su carrera-, y aparece ya la mujer culpable, que reaparecerá por ejemplo en "Vértigo/De entre los muertos" (Vertigo, 1958), en "Psicosis" (Pyscho, 1960), o en "Marnie, la ladrona" (Marnie, 1964), muchos años después. Anny Ondra, una estrella en su momento, y bastante guapa, hace una gran labor, aunque su voz fue sustituida por la de otra actriz en la versión sonora, que es la que he podido ver.