Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Sibila de Delfos:
7
Intriga. Fantástico Tras un fatídico accidente de coche, un brillante neurocirujano es sometido a una serie de pruebas que revelan que tiene cáncer y que necesita un trasplante de médula. Cuando decide pedir ayuda a sus padres, éstos le revelarán un extraño secreto del pasado. El protagonista emprende entonces una investigación que le permite averiguar que, durante la Guerra Civil Española (1936-1939), un grupo de niños nació con una extraña peculiaridad: ... [+]
7 de julio de 2013
1 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
A pesar de que Juan Carlos Medina no es precisamente un pipiolo recién llegado al mundo del cine y concretamente a los géneros de terror y ciencia ficción, no está de más recordar que esta es su primera película. Porque Insensibles es una película extraordinariamente bien rodada, con un estilo muy internacional, con elegancia, y con un dominio de la luz y las sombras apabullante. La atmósfera es muy eficaz (ver el prólogo, o la carnicería que forma uno de los niños con un bisturí y un tobillo) y el aspecto visual termina por ser lo mejor de una muy buena muestra de género.
Pero, ¿de qué género? Porque ahí es donde está el principal problema de Insensibles. No sabe qué película quiere ser: un drama familiar, un relato bélico, una cinta de terror a lo Wes Craven o una fantasía de ciencia-ficción. Apunta en todas las direcciones y aunque en todas tiene escenas y detalles interesantes, la mezcla no termina de funcionar como debería. El ritmo es irregular y todo da la sensación de híbrido no muy bien ensamblado. Aun así, como decíamos, hay muchas escenas que rozan la perfección, como las de los interrogatorios de Félix Gómez (siempre fantástico), el accidente inicial a cámara lenta o por supuesto el final, una muy emotiva secuencia llena de magia y efectos visuales. Si encima a esto añadimos las excelentes presencias de Juan Diego y Alex Brendemühl, el resultado es un muy interesante y buen ejemplo de cine de género hecho en España que demuestra la excelente salud del fantástico habado en español (o catalán, para el caso).

Lo mejor: Los niños, Brendemühl, Diego y la atmósfera terrorífica de la cinta.
Lo peor: En ningún momento da la sensación de ser una gran película, una que vaya a pasar a la historia.
Sibila de Delfos
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow