Película de acción con mayúsculas. Todo en ella es perfecto. No intenta copiar o imitar a la original (puesto que el resultado sería descaradamente inferior) y por el contrario se diferencia de aquella en la acción. También hay suspense, pero es totalmente secundario. Todo ello, sin dejar de ser fiel a los acontecimientos acaecidos en el film de Scott. Sigourney Weaver se desenvuelve magistralmente y borda un papel que en manos de otra, no hubiese pasado de correcto (no en vano la nominaron al Oscar). Aderezada con toques de humor que funcionan a la perfección para rebajar el nivel de tensión, Aliens es un film redondo, espectacular, terrorífico, oscuro, agobiante y de una calidad indiscutible.
Bestial.