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Voto de Nekro Zombie:
7
5,0
6.338
Terror. Comedia. Thriller
“¡No quiero morir en Canadá!”, suplica Wallace Bryton, un popular podcaster al que una serie de circunstancias ha llevado hasta la frontera de Canadá, donde vive Howard Howe, que una vez fue salvado por una morsa. Misántropo recalcitrante, Howe tendrá una forma muy poco ortodoxa de sacar a Wallace su lado más “animal”. (FILMAFFINITY)
12 de diciembre de 2014
7 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
A diferencia de otras expresiones artísticas, el cine, aun siendo de bajo presupuesto, es muy caro de realizar. Tan caro que, desgraciadamente, los productores cada vez apuestan menos por los "autores". El motivo principal es que si se deja la película en manos de un autor y no de un grupo de profesionales que saben qué vende y qué no, qué funciona y qué no, en qué punto se ha de insertar lo que el público quiere ver y en qué punto se debe obviar, el proyecto puede ser desde una auténtica maravilla ensalzada por la crítica y los espectadores más exigentes a un rotundo fracaso que básicamente se traduce en perder dinero y estatus. Y ya sabemos que el mundo actualmente se mueve por el dinero y el estatus.
Pues bien, Kevin Smith es uno de esos autores que a día de hoy sobreviven en una industria cada vez más obsesionada con crear películas que parecen videojuegos sin trascendencia alguna ni mayor intención que reventar la taquilla. La parte positiva de ver una película "personal" es que más o menos sabes a qué te vas a enfrentar debido a que cada director posee unas características determinadas. La parte negativa es que, precisamente por ello, son muchos, muchísimos, los que no van a poder conectar con ella ni entender su mensaje. Especialmente si se desconoce quién es el director y de donde viene, cuáles son sus obsesiones, su estética, etc.
"Clerks", la primera película de Smith, fue tan endiabladamente buena que desde entonces no ha podido desprenderse de su sombra. Cada vez que estrena un nuevo filme, se le echa en cara que no llega al nivel de "Clerks". Es la maldición de la ópera prima: de ser una obra maestra, todos quieren más de esa obra maestra. Sin embargo, opino que Smith ha ido evolucionando con los años y que encima lo ha hecho bien. No sólo ha depurado su estilo como director, sino que cada vez le saca un mayor rendimiento a los actores y sus planos están mejor construidos. Además, viendo su trayectoria profesional hay películas que igual no resultan tan "míticas" o tan "de culto" como "Clerks", pero no por ello son menos interesantes. Por ejemplo, "Persiguiendo a Amy" o "Dogma".
Digo todo esto porque "Tusk" no es un thriller, no es una película de terror, no es una comedia ni tampoco es una crítica social. Es simplemente una película de Kevin Smith. Quienes aseguran que no acaba de funcionar en ninguno de los géneros que mezcla están pasando por alto que, más que la búsqueda de una pesadilla colectiva, lo que se nos muestra es uno de los principales temores del director. Es algo de lo que hablaré más adelante.
CONTINÚA EN SPOILERS.
Pues bien, Kevin Smith es uno de esos autores que a día de hoy sobreviven en una industria cada vez más obsesionada con crear películas que parecen videojuegos sin trascendencia alguna ni mayor intención que reventar la taquilla. La parte positiva de ver una película "personal" es que más o menos sabes a qué te vas a enfrentar debido a que cada director posee unas características determinadas. La parte negativa es que, precisamente por ello, son muchos, muchísimos, los que no van a poder conectar con ella ni entender su mensaje. Especialmente si se desconoce quién es el director y de donde viene, cuáles son sus obsesiones, su estética, etc.
"Clerks", la primera película de Smith, fue tan endiabladamente buena que desde entonces no ha podido desprenderse de su sombra. Cada vez que estrena un nuevo filme, se le echa en cara que no llega al nivel de "Clerks". Es la maldición de la ópera prima: de ser una obra maestra, todos quieren más de esa obra maestra. Sin embargo, opino que Smith ha ido evolucionando con los años y que encima lo ha hecho bien. No sólo ha depurado su estilo como director, sino que cada vez le saca un mayor rendimiento a los actores y sus planos están mejor construidos. Además, viendo su trayectoria profesional hay películas que igual no resultan tan "míticas" o tan "de culto" como "Clerks", pero no por ello son menos interesantes. Por ejemplo, "Persiguiendo a Amy" o "Dogma".
Digo todo esto porque "Tusk" no es un thriller, no es una película de terror, no es una comedia ni tampoco es una crítica social. Es simplemente una película de Kevin Smith. Quienes aseguran que no acaba de funcionar en ninguno de los géneros que mezcla están pasando por alto que, más que la búsqueda de una pesadilla colectiva, lo que se nos muestra es uno de los principales temores del director. Es algo de lo que hablaré más adelante.
CONTINÚA EN SPOILERS.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Al parecer, la historia de "Tusk" surgió del podcast que Smith comparte con Scott Mosier. Algo que siempre me ha gustado de este director es que se nutre de su ambiente, de lo que conoce. Esto dota a sus películas de un realismo y una cercanía que se desconocen en otros productos sobre "frikis". No es de extrañar que el protagonista del filme, Wallace Bryton (Justin Long), sea un podcaster que se ha hecho famoso por burlarse de algunos youtubers, como por ejemplo el "Kill Bill Kid" (que en la vida real es el famoso "Star Wars Kid" de Youtube), y tratar algunos temas contraculturales. El éxito se le ha subido a la cabeza y ha pasado de ser un tímido freak con complejos a un esperpento insoportable y egocéntrico que se cree muy por encima del resto.
Por motivos de trabajo, tiene que marcharse a Canadá para entrevistar a "Kill Bill Kid". Lamentablemente, se ha sucidado y encontrar otro "weirdo" en Canadá no es tarea fácil. Es ahí cuando contacta con un hombre extraño que acabará secuestrándole y convirtiéndole en una morsa. Es en este punto donde la película me parece original a la vez que asombrosa. Al protagonista, alter-ego del director, se le quita lo único que le hacía ganarse la vida y ser realmente especial: la "voz". Sin ella, no es más que un animal. Un animal bastante patético. Sin su principal poder, se muestra indefenso ante un anciano. No obstante, lejos de amilanarse, su nueva situación le lleva a aprovecharse de su lado más animal, más salvaje. Le lleva a descubrir una parte de sí mismo que siempre había evitado.
Éste es el miedo de Kevin Smith del que hablaba antes: el que de un día para otro no le permitan seguir manifestando sus opiniones y chistes y no pueda continuar lo que ha venido haciendo durante los últimos años. El convertirse en un gordo (es decir, una "morsa") amargado que vive encerrado en una jaula. En que tal vez si le quitan ese punto crítico y cabroncete lo que queda es algo así como nada. En que posiblemente también se le ha subido a la cabeza el estrellato y ha dejado un tanto de lado la moral y a quienes le rodean. Smith se nos desnuda. Nos muestra los fantasmas con los que se enfrenta a diario con buenas dosis de humor.
Por otro lado, este filme tiene diversas curiosidades. Por ejemplo, el cameo de las hijas de Johnny Depp y del propio Kevin Smith. Por ejemplo, que el encargado de los efectos especiales sea Robert Kurtzman, el de "Predator", "Evil Dead II", "Misery" (influencia clarísima de esta película) o "Hostel". Por ejemplo, que contenga diversos tributos a películas como "La Mosca" o "La piel que habito" de Almodóvar (otra influencia clarísima). Por ejemplo, que la estructura esté desordenada para que vayamos conociendo muy progresivamente los motivos de los personajes al más puro estilo thriller. Curiosamente, esto es algo que se ha criticado horrores en América. Por ejemplo, que Smith siga apostando por unos larguísimos diálogos que nunca aburren. Etcétera.
En definitiva, una muy buena película a la que no se la puede comparar con nada. Espero que Kevin Smith siga creciendo y experimentando pese a los duros comentarios que "Tusk" está recibiendo en Estados Unidos. Lo dicho, la primera de "Clerks" estuvo muy bien. Pero hay que pasar página. Claro que sí.
Por motivos de trabajo, tiene que marcharse a Canadá para entrevistar a "Kill Bill Kid". Lamentablemente, se ha sucidado y encontrar otro "weirdo" en Canadá no es tarea fácil. Es ahí cuando contacta con un hombre extraño que acabará secuestrándole y convirtiéndole en una morsa. Es en este punto donde la película me parece original a la vez que asombrosa. Al protagonista, alter-ego del director, se le quita lo único que le hacía ganarse la vida y ser realmente especial: la "voz". Sin ella, no es más que un animal. Un animal bastante patético. Sin su principal poder, se muestra indefenso ante un anciano. No obstante, lejos de amilanarse, su nueva situación le lleva a aprovecharse de su lado más animal, más salvaje. Le lleva a descubrir una parte de sí mismo que siempre había evitado.
Éste es el miedo de Kevin Smith del que hablaba antes: el que de un día para otro no le permitan seguir manifestando sus opiniones y chistes y no pueda continuar lo que ha venido haciendo durante los últimos años. El convertirse en un gordo (es decir, una "morsa") amargado que vive encerrado en una jaula. En que tal vez si le quitan ese punto crítico y cabroncete lo que queda es algo así como nada. En que posiblemente también se le ha subido a la cabeza el estrellato y ha dejado un tanto de lado la moral y a quienes le rodean. Smith se nos desnuda. Nos muestra los fantasmas con los que se enfrenta a diario con buenas dosis de humor.
Por otro lado, este filme tiene diversas curiosidades. Por ejemplo, el cameo de las hijas de Johnny Depp y del propio Kevin Smith. Por ejemplo, que el encargado de los efectos especiales sea Robert Kurtzman, el de "Predator", "Evil Dead II", "Misery" (influencia clarísima de esta película) o "Hostel". Por ejemplo, que contenga diversos tributos a películas como "La Mosca" o "La piel que habito" de Almodóvar (otra influencia clarísima). Por ejemplo, que la estructura esté desordenada para que vayamos conociendo muy progresivamente los motivos de los personajes al más puro estilo thriller. Curiosamente, esto es algo que se ha criticado horrores en América. Por ejemplo, que Smith siga apostando por unos larguísimos diálogos que nunca aburren. Etcétera.
En definitiva, una muy buena película a la que no se la puede comparar con nada. Espero que Kevin Smith siga creciendo y experimentando pese a los duros comentarios que "Tusk" está recibiendo en Estados Unidos. Lo dicho, la primera de "Clerks" estuvo muy bien. Pero hay que pasar página. Claro que sí.