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Voto de TOM REGAN:
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Ciencia ficción. Aventuras
El empresario Archer, el general retirado Powers y el investigador aeroespacial Anderson colaboran en la puesta en órbita de un cohete propulsado con energía atómica. Construyen la nave espacial "Luna" en una base secreta del desierto de Mojave, pero agentes de una potencia extranjera intentan sabotearles. Cuando ven peligrar la misión, deciden adelantarse a sus enemigos y despegar con destino a la Luna... (FILMAFFINITY)
10 de mayo de 2024
0 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
111/06(07/05/24) Sugestivo en su premisa, aburrido en su desarrollo este film de ciencia ficción estadounidense en tecnicolor de 1950, producido por el artista animador magiar George Pal y dirigida por Irving Pichel. Se considera primera gran película estadounidense de ciencia ficción aborda desafíos científicos y de ingeniería prácticos de viajes espaciales y especula sobre cómo sería una expedición tripulada a la Luna. Pal encargó el guión inicial a James O'Hanlon y Rip Van Ronkel, el afamado escritor de ciencia ficción Robert A. Heinlein contribuyó significativamente al libreto final, desempeñándose también como asesor técnico de la película. Ciertos elementos de la historia de la novela juvenil de Heinlein de 1947 “Rocket Ship Galileo”, fueron adaptados para su uso en la película, y en septiembre de 1950 publicó una novela corta, "Destination Moon", basada en el guión. La trama de la película también se parece a partes de la novela de Heinlein “El hombre que vendió la luna”, escribió en 1949 pero no publicó hasta 1951, un año después del estreno de la película Pal. Aunque el relato tiene enormes similitudes con la obra de culto silente alemana de Fritz Lang “Una mujer en la luna” (1929), donde el clímax final es una clara copia.
Entre los alicientes del film cuenta con los f/x de Lee Zavitz (creador de los efectos visuales del incendio de Atlanta en “Lo que el viento se llevó”, y también obras como “La vuelta al mundo en 80 días” o “El tren”); Esa nave espacial-cohete que parece salida de una ilustración de un cuento para niños, creada por el diseñador artístico Ernst Fegté (“Cinco tumbas al Cairo”), con esos trajes espaciales tan divertidos en su infantilidad; Los f/x, la nave y la fotografía se funden en muchas escenas, me ha gustado y tuvo que ser espectacular en su momento en cine ver como la pantagruélica plataforma se mueve del cohete para dejar espacio a su despegue, como notable es la secuencia del despegue; están los fondos pintados de la Luna de Chesley Bonestell, apodado el "Padre del arte espacial moderno", sumergiéndonos en una Luna árida, agreste, ignota, con el fondo (muy falsete) iluminado por infinitas estrellas (entrañable como cantan son bombillas);realzados por la fulgente cinematografía de Lionel Lindon (“La vuelta al mundo en 80 días” o “El mensajero del miedo”), con secuencias vistosas, como las de ver la Tierra desde la Luna pero a través del ojo de buey del cohete; Reseñable la labor de maquillaje de Webster C. Phillips (“La americanización de Emily”), sobre todo para exponer los efectos de la fuerza G en los rostros de los astronautas, esto visto hoy es muy cándido, pues no se puede hacer sin cascos; Se puede destacar el recurso narrativo integrado de colocar en el metraje un corto animado didáctico con nada menos que El Pájaro loco de Walter Lantz; También mencionable la singular banda sonora creada por el compositor Leith Stevens (“La Guerra de los Mundos”), innovadora creando un halo de misterio cuasi-místico en sus melodías inquietantes, emitiendo desazón y misterio, evocando lo desconocido.
Es una obra hija de su tiempo, encuadrada en el sub género Guerra Fría, donde en producciones serie b se advertía de los peligros de la amenaza soviética. En este caso, se nos hace ver la importancia de la conquista de la Luna para que no la tomen los malos, nunca se mencionan a los comunistas bolcheviques, aunque se saben son ellos, y la puedan utilizar como base para lanzar misiles a todo el planeta. Esta idea se adorna con mensajes sobre lo que ha hecho ser lo que es USA, ósea, la iniciativa privada hace que todo se mueva, aun con las trabas gubernamentales, el motor individual y emprendedor arrastrando al Imperio USA, en contra de lo que era la URSS, todo por y para el estado. Cinta que se adelanta casi dos décadas al alunizaje que si fue primera USA (hay conspiranóicos que lo niegan), de esa primera pisada de un humano sobre el satélite de Neil Armstrong, y con ello, vista hoy día, resulta entrañable por lo infantiloide que resulta en muchísimos aspectos. Ejemplo de esto es que para convencer a unos potenciales empresarios de que inviertan en el proyecto, los reúnen y les proyectan un corto de animación con el Pájaro Loco explicando la teoría y la práctica el método de propulsión para el viaje a la Luna y con ello hasta los más escépticos caen rendidos a los parabienes del plan espacial, como digo, esto es de una puerilidad supina, conmovedor por lo patético que resulta.
Esto indaga en el modo chusco en que se toman muchas de las decisiones cruciales de la misión, rayando en lo absurdo, como la forma en que sustituyen a uno de los astronautas que tiene una enfermedad y cogen al primer mecánico que pasa por allí, este acepta como el acepta tormar se una copa en el abr de al lado, ridículo no! Lo siguiente! Por supuesto lo de las pruebas físicas y psicológicas para acceder a tamaña misión es algo que ni están ni se le esperan. El modo de despegar a la carrera, sin tener en cuenta la posición de la Tierra y de la Luna es d elo más risible.
Hay una trama plana, sin alicientes, sin chicha, sin personajes con carisma en los que simpatizar, los protagonistas son clichés sin alma, sin fondo, sin pasado, sin anhelos, ello actuado por John Archer, Warner Anderson, y Tom Powers y como meros soportes para pronunciar diálogos sin sustancia alguna. Solo es algo diferente Dick Wesson como el mecánico Joe Sweeney, en un rol irritante de chistoso de Broolkyn sin gracia, soltando cinismo y paridas sin la menor gracia, intentando ser el elemento desengrasante.
Como la historia tiene poca chicha le ponen durante el trayecto a la Luna una salida fuera del cohete (por que el mecánico echo grasa a la antena telescópica, y se congeló, menudos utilleros’ había!), ello para mostrar al mundo los avances en f/x de ese momento, vistos hoy bastante primarios, ello ataviados con traje de astronauta y ridículo calzado con imanes, como esto da poco de sí,... (sigo en spoiler)
Entre los alicientes del film cuenta con los f/x de Lee Zavitz (creador de los efectos visuales del incendio de Atlanta en “Lo que el viento se llevó”, y también obras como “La vuelta al mundo en 80 días” o “El tren”); Esa nave espacial-cohete que parece salida de una ilustración de un cuento para niños, creada por el diseñador artístico Ernst Fegté (“Cinco tumbas al Cairo”), con esos trajes espaciales tan divertidos en su infantilidad; Los f/x, la nave y la fotografía se funden en muchas escenas, me ha gustado y tuvo que ser espectacular en su momento en cine ver como la pantagruélica plataforma se mueve del cohete para dejar espacio a su despegue, como notable es la secuencia del despegue; están los fondos pintados de la Luna de Chesley Bonestell, apodado el "Padre del arte espacial moderno", sumergiéndonos en una Luna árida, agreste, ignota, con el fondo (muy falsete) iluminado por infinitas estrellas (entrañable como cantan son bombillas);realzados por la fulgente cinematografía de Lionel Lindon (“La vuelta al mundo en 80 días” o “El mensajero del miedo”), con secuencias vistosas, como las de ver la Tierra desde la Luna pero a través del ojo de buey del cohete; Reseñable la labor de maquillaje de Webster C. Phillips (“La americanización de Emily”), sobre todo para exponer los efectos de la fuerza G en los rostros de los astronautas, esto visto hoy es muy cándido, pues no se puede hacer sin cascos; Se puede destacar el recurso narrativo integrado de colocar en el metraje un corto animado didáctico con nada menos que El Pájaro loco de Walter Lantz; También mencionable la singular banda sonora creada por el compositor Leith Stevens (“La Guerra de los Mundos”), innovadora creando un halo de misterio cuasi-místico en sus melodías inquietantes, emitiendo desazón y misterio, evocando lo desconocido.
Es una obra hija de su tiempo, encuadrada en el sub género Guerra Fría, donde en producciones serie b se advertía de los peligros de la amenaza soviética. En este caso, se nos hace ver la importancia de la conquista de la Luna para que no la tomen los malos, nunca se mencionan a los comunistas bolcheviques, aunque se saben son ellos, y la puedan utilizar como base para lanzar misiles a todo el planeta. Esta idea se adorna con mensajes sobre lo que ha hecho ser lo que es USA, ósea, la iniciativa privada hace que todo se mueva, aun con las trabas gubernamentales, el motor individual y emprendedor arrastrando al Imperio USA, en contra de lo que era la URSS, todo por y para el estado. Cinta que se adelanta casi dos décadas al alunizaje que si fue primera USA (hay conspiranóicos que lo niegan), de esa primera pisada de un humano sobre el satélite de Neil Armstrong, y con ello, vista hoy día, resulta entrañable por lo infantiloide que resulta en muchísimos aspectos. Ejemplo de esto es que para convencer a unos potenciales empresarios de que inviertan en el proyecto, los reúnen y les proyectan un corto de animación con el Pájaro Loco explicando la teoría y la práctica el método de propulsión para el viaje a la Luna y con ello hasta los más escépticos caen rendidos a los parabienes del plan espacial, como digo, esto es de una puerilidad supina, conmovedor por lo patético que resulta.
Esto indaga en el modo chusco en que se toman muchas de las decisiones cruciales de la misión, rayando en lo absurdo, como la forma en que sustituyen a uno de los astronautas que tiene una enfermedad y cogen al primer mecánico que pasa por allí, este acepta como el acepta tormar se una copa en el abr de al lado, ridículo no! Lo siguiente! Por supuesto lo de las pruebas físicas y psicológicas para acceder a tamaña misión es algo que ni están ni se le esperan. El modo de despegar a la carrera, sin tener en cuenta la posición de la Tierra y de la Luna es d elo más risible.
Hay una trama plana, sin alicientes, sin chicha, sin personajes con carisma en los que simpatizar, los protagonistas son clichés sin alma, sin fondo, sin pasado, sin anhelos, ello actuado por John Archer, Warner Anderson, y Tom Powers y como meros soportes para pronunciar diálogos sin sustancia alguna. Solo es algo diferente Dick Wesson como el mecánico Joe Sweeney, en un rol irritante de chistoso de Broolkyn sin gracia, soltando cinismo y paridas sin la menor gracia, intentando ser el elemento desengrasante.
Como la historia tiene poca chicha le ponen durante el trayecto a la Luna una salida fuera del cohete (por que el mecánico echo grasa a la antena telescópica, y se congeló, menudos utilleros’ había!), ello para mostrar al mundo los avances en f/x de ese momento, vistos hoy bastante primarios, ello ataviados con traje de astronauta y ridículo calzado con imanes, como esto da poco de sí,... (sigo en spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
…hacen uno de ellos (Cargraves) salga despedido del magnetismo del cohete al espacio vasto sin rumbo, entonces entra en marcha la inventiva humana, para rescatarlo con botella de gas para apagar incendios (cosa copio Cuarón para su film “Gravity”). Deja entrever otra de las lagunas, para ello dejan el interior del cohete todos los tripulantes, si por algo se cierra la escotilla se quedan afuera, un sinsentido.
Luego está la parte de la Luna, sin épica, con aterrizaje inverosímil, se realiza girando el morro hacia arriba y retrocediendo contra la presión de su chorro propulso (¿?). Cuando los astronautas descienden y pisan nadie les filma, nadie les garba el audio, no tienen ninguna frase preparada, pero qué más da si tampoco quedaran registradas, parece hecho todo a prisa. Vemos la superficie lunar de un modo risible, con grietas que sugieren ha habido agua y se ha secado, cuando incluso entonces era sabido que esto no era así (¿?). Sobre esto: Bonestell, pintó un gran telón de fondo imitaba riscos y montañas lunares, no estaba contento con las grietas, diseñadas por el director de arte Ernst Fegté. "Eso fue un error", insistió a Gail Morgan Hickman, autora de las películas de George Pal. Pero Pal le explicó a Hickman: “Chesley tenía razón, por supuesto... pero estábamos filmando en un escenario de sonido pequeño debido a nuestro presupuesto limitado. Tuvimos que hacer que el decorado pareciera más grande. Chesley diseñó un hermoso telón de fondo, pero necesitaba algo que le diera profundidad. Por eso hicimos las grietas. Las grietas en el primer plano eran grandes y las de la distancia eran pequeñas, por lo que daban una sensación real de perspectiva. En algunas escenas incluso utilizamos enanos con pequeños trajes espaciales para aumentar la sensación de profundidad”.
En el tiempo sobre la Luna la tripulación se atiene a unas cuantas operaciones naif sin emitir que sean algo trascendental lo que hacen, más bien sugieren la misión era llegar el punto A y el B volver, entre medias naderías. Hacen mediciones con un contador Geiger que pueden sugerir hay uranio, lo que me da a entender están mandando un mensaje a los USA de que hay que llegar cuanto antes para sacar este posible material con el que se fabrican bombas atómicas (puaj!), como si en la Tierra no hubiera. Se echan algunas fotos turística, una incluso de montaje haciendo que Sweenney sostenga la Tierra cual Atlas. Pero de verdad los guionistas no tuvieron la idea de que llevaran una cámara súper 8? Ridículo! Ah, también tienen un gran arma de rayos que no hacen funcionar, está allí para aparentar (¿?). Transmitiendo la sensación de que para que leches volver al asteroide. Para culminar la inocencia de la trama nos cuelan un épico clímax de sacrificio por el bien mayor, muy tosco, dando una impresión grotesca de viaje improvisado sobre la marcha.
Spoiler:
Rush final: De buenas a primeras desde la base en Tierra les dicen que sobran 500 kg de carga para el despegue. Menuda preparación de viaje a la Luna! Por supuesto entonces ya sabemos que al final deben decidir quien se queda en la Luna sacrificándose por el resto. Todos en un buenismo sangrante se eligen para ello. Para ello uno incluso prohíbe a otro quedarse allí porque tiene muy linda prosa para relazar la belleza de lo que ven desde allí (valiente motivo el tener labia). Hasta que a Barnes se le ocurre sin saberse como la idea de cómo echar fuera los kg necesarios para despegar sin afectar a la tripulación. Despegan y el film acaba con el cohete a medio camino a la Tierra. En la escena final, cuando la tripulación se acerca a la Tierra, la tradicional tarjeta de título "El Fin" presagia el amanecer de la próxima Era Espacial: "Este es EL FINAL... del Principio".
Film plano, que solo tiene el interés ‘arqueológico’ de ver cómo eran entonces los f/x especiales y como han avanzado. Gloria Ucrania!!!
Para leer más sobre el film ir a: https://tomregan.blogspot.com/2024/05/con-destino-la-luna-11106070524.html
Luego está la parte de la Luna, sin épica, con aterrizaje inverosímil, se realiza girando el morro hacia arriba y retrocediendo contra la presión de su chorro propulso (¿?). Cuando los astronautas descienden y pisan nadie les filma, nadie les garba el audio, no tienen ninguna frase preparada, pero qué más da si tampoco quedaran registradas, parece hecho todo a prisa. Vemos la superficie lunar de un modo risible, con grietas que sugieren ha habido agua y se ha secado, cuando incluso entonces era sabido que esto no era así (¿?). Sobre esto: Bonestell, pintó un gran telón de fondo imitaba riscos y montañas lunares, no estaba contento con las grietas, diseñadas por el director de arte Ernst Fegté. "Eso fue un error", insistió a Gail Morgan Hickman, autora de las películas de George Pal. Pero Pal le explicó a Hickman: “Chesley tenía razón, por supuesto... pero estábamos filmando en un escenario de sonido pequeño debido a nuestro presupuesto limitado. Tuvimos que hacer que el decorado pareciera más grande. Chesley diseñó un hermoso telón de fondo, pero necesitaba algo que le diera profundidad. Por eso hicimos las grietas. Las grietas en el primer plano eran grandes y las de la distancia eran pequeñas, por lo que daban una sensación real de perspectiva. En algunas escenas incluso utilizamos enanos con pequeños trajes espaciales para aumentar la sensación de profundidad”.
En el tiempo sobre la Luna la tripulación se atiene a unas cuantas operaciones naif sin emitir que sean algo trascendental lo que hacen, más bien sugieren la misión era llegar el punto A y el B volver, entre medias naderías. Hacen mediciones con un contador Geiger que pueden sugerir hay uranio, lo que me da a entender están mandando un mensaje a los USA de que hay que llegar cuanto antes para sacar este posible material con el que se fabrican bombas atómicas (puaj!), como si en la Tierra no hubiera. Se echan algunas fotos turística, una incluso de montaje haciendo que Sweenney sostenga la Tierra cual Atlas. Pero de verdad los guionistas no tuvieron la idea de que llevaran una cámara súper 8? Ridículo! Ah, también tienen un gran arma de rayos que no hacen funcionar, está allí para aparentar (¿?). Transmitiendo la sensación de que para que leches volver al asteroide. Para culminar la inocencia de la trama nos cuelan un épico clímax de sacrificio por el bien mayor, muy tosco, dando una impresión grotesca de viaje improvisado sobre la marcha.
Spoiler:
Rush final: De buenas a primeras desde la base en Tierra les dicen que sobran 500 kg de carga para el despegue. Menuda preparación de viaje a la Luna! Por supuesto entonces ya sabemos que al final deben decidir quien se queda en la Luna sacrificándose por el resto. Todos en un buenismo sangrante se eligen para ello. Para ello uno incluso prohíbe a otro quedarse allí porque tiene muy linda prosa para relazar la belleza de lo que ven desde allí (valiente motivo el tener labia). Hasta que a Barnes se le ocurre sin saberse como la idea de cómo echar fuera los kg necesarios para despegar sin afectar a la tripulación. Despegan y el film acaba con el cohete a medio camino a la Tierra. En la escena final, cuando la tripulación se acerca a la Tierra, la tradicional tarjeta de título "El Fin" presagia el amanecer de la próxima Era Espacial: "Este es EL FINAL... del Principio".
Film plano, que solo tiene el interés ‘arqueológico’ de ver cómo eran entonces los f/x especiales y como han avanzado. Gloria Ucrania!!!
Para leer más sobre el film ir a: https://tomregan.blogspot.com/2024/05/con-destino-la-luna-11106070524.html