Entretenida película de Sam Raimi que sigue la estela de "El sexto sentido", "El último escalón" y "Lo que la verdad esconde". Lo malo es que son films muy calcados, y al final lo que poco gusta, mucho cansa. No obstante, son películas entretenidas, de terror más psicológico que sangriento, huyendo de variantes de la historia del hombre del saco, tal y como dice Pau Vergara en la Turia. Esto es cierto. Los "Halloween", "Viernes 13" y "La matanza de Texas", que parecían reverdecer viejos laureles con la saga "Scream" y "Sé lo que hicistéis el último verano" han dejado paso a otro tipo de terror más inquietante, que da verdadero miedo, merced a un guión rico en golpes de efecto que busca simplemente eso, que el espectador cierre los ojos cuando el decorado se vuelve tenebroso y cuando la música nos pone los pelos de punta. Desde ese punto de vista, estas películas aseguran un buen rato, aunque pierdan el ritmo alguna que otra vez. Desde luego, en mi opinión, "Premonición" y "El último escalón" son mejores que el resto. A ver si nos soprenden Amenábar con su "The Others" y Balagueró con su "Darkness".