Haz click aquí para copiar la URL
España España · Manresa
Voto de Dani_DP:
8
Drama Randy "The Ram" Robinson (Mickey Rourke) es un luchador profesional de wrestling que, tras haber sido una estrella en la década de los ochenta, trata de continuar su carrera en el circuito independiente, combatiendo en cuadriláteros de tercera categoría. Cuando se da cuenta de que los brutales golpes que ha recibido a lo largo de su carrera le empiezan a pasar factura, decide poner un poco de orden en su vida: intenta acercarse a ... [+]
17 de enero de 2009
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Aronofsky vuelve a sorprender con la desgarradora historia de un luchador que debe afrontar el combate más importante de su carrera: su vida.

Parece que la moraleja que trata de enseñarnos la historia del personaje (casi alter ego) de Mickey Rourke es que el éxito y la fama en un mundo tan absorbente y sacrificado, como es el del 'wrestling', acaba siendo, de forma inexorable, incompatible con una vida "normal".

Tras consagrarse con la magistral "Requiem for a dream", Aronofsky completa un soberbio retrato de la más absoluta decadencia de un hombre que lo deja todo atrás para centrarse en su única pasión: la lucha. Un mundo sórdido y sobrecogedor que habita Randy y que acaba siendo su único hábitat natural. Y es que los años no pasan en balde para nadie y, en un momento dado, nadie es indestructible ni tampoco inmune al dolor de la soledad y eso es lo que Randy trata de afrontar desesperadamente. El pasado siempre vuelve y la redención no siempre es posible, por lo que esta vez el luchador tendrá que decidir si seguir luchando o tirar la toalla.

La interpretación de Rourke es sublime. Su cuerpo maltratado e hinchado al límite refleja la vida de un hombre que sacrifica su pasado por un mundo en que no existe retorno posible a la vida normal. Su personaje está hecho a su semejanza y es encarnado con una pasión sólo al alcance del controvertido Mickey Rourke. Un hombre hercúleo, a la par que entrañable, con una vida interior demacrada más allá de sus cicatrices y magulladuras.

La realización de Aronofsky y la fotografía son soberbias. El poco convencional uso del plano secuencia con Steady Cam, también. Pues no hay modo mejor de contar las reales y crudas andanzas de Randy por su vida rutinaria con tanta cercanía y sensibilidad.

Bravo, Mickey. Bravo, Darren.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Dani_DP
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow