La serie está muy bien y no se le pueden poner muchas pegas pero por la nota que tiene y las críticas que he escuchado y leído, me esperaba algo más. No se me malinterprete. Las actuaciones son muy buenas; el diseño de producción también; la fotografía está muy cuidada siendo difícil parar la imagen sin que nos quede una imagen digna de enmarcar; el ritmo es muy ameno; la banda sonora está muy bien elegida y metida; el vestuario es espectacular; y logran hacer del ajedrez un deporte trepidante. Además lejos de lo que pueda parecer, no se empeñan en meternos de forma descarada los típicos eslogan de empoderamiento femenino, sino que construyen un personaje que evoluciona de una forma no forzada que se tiene que desenvolver en un mundo de hombres, sin resaltar constantemente que es una mujer. Las dificultades por su sexo surgen de una manera muy natural. El montaje también es digno de resaltar, sobre todo en algunas partidas donde, como he dicho antes, logran hacer del ajedrez un deporte muy dinámico y cercano para la gran mayoría del público.

La historia es cierto que no arriesga demasiado y que es previsible, pero es previsible porque está contada con coherencia y es fiel a lo que plantea. Prefiero mil veces una serie o película previsible a algo que busque la sorpresa por sorpresa como por ejemplo 'Walking Dead' (la pongo como ejemplo porque me la estoy viendo ahora mismo pero hay cientos de pelis y series que anteponen sorprender a la coherencia).

Como persona que lo único que sabe de ajedrez es como mover las fichas y alguna que otra jugada, no puedo opinar sobre el rigor sobre el apartado técnico del ajedrez. Supongo que como casi todas las historias de deporte y superación, tendrá una buena dosis de exageración en favor de la dramatización.

En resumen, creo que he sido víctima de la gran espectativa que me he creado a partir de las opiniones externas pero sin lugar a dudas estamos ante una gran serie.