Definitivamente increíble. Es una asombrosa combinación de romanticismo, creatividad, imaginación, locura, drama, y absoluta libertad que atormenta, dejándote perplejo, con una sensación extraña difícilmente explicable pero que vale la pena descubrir.
El guión es fantástico, los actores logran explotar al máximo el potencial de los personajes creados a su medida, con una química que atraviesa la pantalla y atrapa al espectador, dejándose llevar por la historia, viviendo una clase de amor no convencional y bastante controvertido.
Creo que la película nos acerca a un mundo paralelo, en donde la infancia está indefinida y el juego es el eje transversal que atraviesa el amor de Sophie y Julien atándolos a un deseo incontenible que define el curso de sus vidas, intentando vivir la vida con otros ojos, soñar con otras realidades, sin tantas limitaciones, sin tabúes... descubrir un amor que no termine jamás y que pueda erizarte la piel con tan sólo escucharlo respirar.