Recientemente, William Hurt abandonó este mundo a la edad de 71 años debido a un cáncer de próstata y la verdad es que era uno de esos actores a los que tuve un poco de cariño y su fallecimiento me puso un poco triste, como cuando se fueron gente como Sean Connery o Alan Rickman. Actores con los que coges algo más de aprecio por la calidad de sus trabajos y lo poderosos que eran sus personalidades; no me quiero imaginar el día que no estén por aquí gente como Clint Eastwood, Sigourney Weaver, Robert De Niro o Al Pacino. Ojalá quede mucho para eso.

'Gorky Park' fue una elección idónea no solo para seguir recordando a William Hurt, sino porque el género de intriga siempre me ha atraído. Además, en el reparto no solo destacaba el nombre de Hurt, también nombres de la talla de Lee Marvin, Joanna Pacula o Brian Dennehy (recientemente fallecido también) cuyas trayectorias hablan bastante bien de ellos mismos.

Este filme basado en la novela homónima de Martin Cruz Smith si bien muestra con precisión el paisaje urbano soviético, no deja de sorprender que mayormente hablen inglés; aunque es un detalle mínimo y que no impide disfrutar el visionado siempre llama la atención. La clave es que su visionado, como ya he dicho, se disfruta. Se disfruta por la calidad de las interpretaciones de su elenco, desde el carácter frío y a veces temperamental de Arkady Renko hasta la inocencia y desconfianza de Irina Asanova (una Joanna Pacula que debutaba en un filme fuera de su Polonia natal), pasando por la dureza contenida de Jack Osborne gracias a Lee Marvin cuyo aspecto imponente le va como anillo al dedo a su personaje.

Un libreto en el que siempre están pasando cosas de mayor o menor calado como una investigación, un descubrimiento o un romance hace que el metraje vaya pasando sin notarse demasiado su duración con un tratamiento de las escenas que hace mantener la atención porque siempre se espera que vaya a pasar algo y una banda sonora (obra de James Horner, quien también nos abandonó, desgraciadamente) que raya un notable nivel en todo momento son los otros ingredientes clave en el por qué este filme no solo aprueba, sino que aprueba sobradamente. A pesar de los gélidos escenarios vistos durante todo el metraje, sin duda 'Gorky Park' no deja frío.