Del realizador italiano Lucio Fulci siempre hay que saber que es lo que se espera para no pillar con la guardia baja, y en su caso es generalmente productos de serie B de terror con cierto encanto; 'Manhattan Baby' no es una excepción en su filmografía.

Protagonizada por Christopher Connelly (quien hizo parte de su carrera en las producciones italianas), es una película que para quien sea un cinéfilo veterano o entrando en ello, recuerda mucho a 'El exorcista' y un poco de 'Poltergeist (Fenómenos extraños)', aunque es curioso que recuerde al filme de Tobe Hooper si se estrenaron el mismo año, y no tiene la magia de las películas de 1973 y 1982, respectivamente.

Si uno sabe donde se mete es posible que hasta esta película le siente mejor que sin saber nada de ella. Las posesiones con un poco de terror psicológico aquí y allá junto con una música de sintetizadores marca de la casa de la serie B italiana con toques exóticos al estar presente la mitología egipcia y con un reparto de actores que son resultones sin ser ni mucho menos la octava maravilla (destacan especialmente los niños, Giovanni Frezza y Brigitta Boccoli) hacen de 'Manhattan Baby' una cosa que como se dice, "se deja ver".

Quien espere una producción de terror de calidad cinco estrellas ya puede irse olvidando de ello; si es fan de las producciones de serie B quizás le pueda encontrar algo más de jugo a una mezcla ingeniosa que no consigue cautivar del todo, pues, salvo secuencias individuales como el ingenioso uso de la luz roja de una lámpara o de un reflejo, el resto es algo que ya se siente a algo ya visto; no solo por las referencias, sino porque no se sale del libro de estilo de películas italianas de terror de bajo presupuesto.

Como curiosidad, llama la atención el nombre del personaje de la niñera de los niños de los protagonistas. No creo que sea casualidad que se llame Jamie Lee cuando Jamie Lee Curtis en 'La noche de Halloween' cuidaba de un joven Tommy Doyle en el filme de 1978.