1970, Estambul, Turquía. Billy Hayes se dispone a subir a un avión con dos kilos de hachís adheridos a su torso… este, no llegaría a su destino como pretendía en un principio. Billy fue arrestado en el aeropuerto de Estambul y más tarde encarcelado por tráfico de drogas.

Así comienza la cruel e impactante historia de Billy en, bajo mi punto de vista, uno de los mejores dramas carcelarios junto a Cadena perpetua o En el nombre del padre y que por momentos recuerda a la famosa y gran Fuga de Alcatraz de Don Siegel con Eastwood como actor principal interpretando el papel del mítico Frank Morris.

Podríamos calificar a esta cinta con muchos adjetivos; efectista, dura, intensa, entretenida, impactante, angustiosa... pero de lo que no cabe ninguna duda, es que esta, es una película impresionante.
Yo, por momentos, llegue a pasarlo realmente mal solo de pensar en el calvario por el que tuvo que pasar este hombre; y es que te sobrecoge ver como un ser humano puede llegar a pasar por tal infierno, hace que desees desesperadamente que esta persona pueda lograr escapar de cualquier forma posible y poder gritar ¡soy libre! Sin temor alguno.

Un notable para Alan Parker y su película, y un notable alto para la gran interpretación de Brad Davis. Anímense a verla, gran película.