Repite formula que ya hemos visto en "Infierno azul" "Open water", pero en esta ocasión la acción transcurre bajo el agua. Tiene mucho merito aguantar la tensión e interés con un solo escenario y dos personajes, y esta película lo consigue durante todo su metraje. A la amenaza del escualo, en esta ocasión se añade que el oxigeno se va agotando (no analizaremos la desproporción con la que se consume el oxigeno en los diferentes tramos) lo que provoca que si entras en la película no tengas ni un segundo de descanso), le sumamos un par de sustos y un giro de guión que te deja con el culo torcido, y el resultado es puro entretenimiento.
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