El argumento de la película es bueno, aunque muy cogidito con pinzas. La realización es mala, con pinzas o sin ellas.
Los actores son pésimos, a no ser que te gusten las películas japonesas donde se lleva lo de sobreactuar, la extravagancia expresiva, la pantomima y la cutrez, todo a la vez.
Demasiado diálogo absurdo en todas las situaciones. Se alejan de lo normal y por lo tanto, de parecer un guión decente.
La sangre a borbotones le añade un efecto gore, a mi modo de ver positivo, porque los amantes de este género tendrán una excusa perfecta para verla. De hecho, la única excusa, porque es mala a rabiar. No tiene absolutamente ningún interes para la gente a la que le gusta el cine de verdad, o al menos que lo intenta.
Como diría Bart Simpson: "Vas listo si la ves, y si la ves, vas listo".