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Voto de Antonio Morales:
6
Drama Mauricio, un rico y famoso artista plástico, acaba de fallecer y, en su lecho de muerte, intenta, sin éxito, revelarle algo a Amalia. Mauricio no ha dejado testamento, así que Amalia decide reunir a su familia, con la que el pintor no tenía buena relación, y les dice que está moribundo para intentar sacarles alguna información que le permita interpretar las últimas palabras de Mauricio. (FILMAFFINITY)
29 de marzo de 2017
12 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Larga es la noche cuando se debate sobre el dinero, la pobreza, el honor, la calumnia que ensucia la honra, la dignidad y el orgullo herido. De tratos y componendas, de pasiones oscuras y de comportamientos despreciables. Todos tienen algo que ocultar y todos defienden sus miserias. Otra interesante película casi desconocida para los aficionados, que no tiene comentarios de los usuarios de la web hasta ahora. Basada en la obra teatral de Antonio Buero Vallejo, uno de los más grandes dramaturgos de la escena española que sólo con “Historia de una escalera”, merecería pasar a la Historia. “Madrugada” refleja, una vez más, con guión de Luis Marquina y el propio cineasta, las inquietudes humanas en la sociedad de su tiempo que siempre trató el humilde escritor, cuyas obras pocas veces fueron llevadas al cine.

Cuenta con unos diálogos muy cuidados, una excelente fotografía del maestro José Aguayo. La música de Cristóbal Halffter sirve perfectamente para esta cinta cargada de conflictos familiares. La esposa de un famoso pintor, Mauricio de 42 años en su lecho de muerte, reúne a la familia para saldar deudas pendientes. Un profundo y despiadado análisis de la institución familiar, con sus envidias, amores furtivos, intereses creados, traiciones y desprecios. Amalia (la argentina Zully Moreno), es su mujer actual de la que sus hermanos desconfían y recelan que se pueda apoderar de todos sus bienes. Surgiendo a flote los trapos sucios, los secretos inconfesables, las rencillas personales y los reproches mutuos. La codicia manifestada en una lucha sin tregua ni cuartel por hacerse con el patrimonio del malogrado hermano, donde todos son sospechosos y todos mienten.

Narrada al ritmo del reloj de pared que preside la estancia, aparece más tarde la señorita Paula, es la sobrina del finado, que se introduce en la reunión como testigo imparcial de las hostilidades desatadas. Logrando el aumento constante de la trama por sus aportaciones, un juego de recelos sentimentales, imposturas y falsedades en un espacio cerrado, entre cuatro paredes durante una madrugada para expiar los pecados y llena de tensiones. La puesta en escena de Antonio Román es ágil con buenos movimientos de cámara pese a la falta de acción, donde la palabra y los gestos adquieren un total protagonismo. Al parecer los actores son los que la representaron en el teatro excepto la protagonista que había sido María Asquerino y que no entiendo por qué no la hizo en el cine, seguramente para vender mejor la película en Sudamérica, pero la hubiera preferido a la estrella argentina. Una película poco prestigiosa pero interesante y recomendable.
Antonio Morales
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